El uso obligatorio de tapaboca, el cumplimiento del distanciamiento social, la higiene absoluta y hasta el permiso para votar desde el auto fueron algunas de las medidas adoptadas este martes por cientos de miles de puntos de votación repartidos por todo Estados Unidos. El objetivo fue disminuir el riesgo de contagio de covid-19, en el país más afectado del mundo por la pandemia. Las precauciones provocaron que el tiempo de espera para votar fuera más largo de lo habitual, aunque las filas en muchos centros fueron cortas o inexistentes. Todo apunta a que gran parte de la culpa de esta poca afluencia se deba al récord de cien millones de votos por anticipado, impulsado por la propia pandemia de coronavirus.
Acceso limitado y distanciamiento
Los centros de votación abrieron muy temprano, a las 6 en algunos estados, y permanecerán habilitados en la mayoría de los casos hasta las 20. En el centro electoral más cercano a la iglesia de Saint Joseph, a la que suele asistir a misa los domingos el candidato demócrata, Joe Biden, unos 40 votantes hacían cola, separados por dos metros de distancia, a primera hora de la mañana para ejercer su derecho al voto en la ciudad de Wilmington, perteneciente al estado de Delaware.
Los electores debían ingresar al lugar de votación en grupos de cuatro a través de unas cabinas con pantallas táctiles, impolutas después de que alguien las tocaba, debido a que los voluntarios pasaban constantemente un líquido higienizante y toallitas húmedas. Ese constante trajín de limpieza hizo que el tiempo de votación de cada ciudadano se prolongara, algo que no pareció importar a aquellos que esperaban, en silencio, su turno.
Votar desde el auto
Al otro lado del país, en Texas, la posibilidad de votar desde el coche, como si se tratara de un restaurante de autoservicio, fue habilitada para facilitar la participación de personas en riesgo o con problemas para hacerlo normalmente debido al coronavirus. En un centro de votación del condado de Travis, cuya capital es Austin, los carteles en español de "Vote desde su auto" estaban colocados encima de varios conos de esa calle cercana al Capitolio texano.
Pese a que la afluencia a ese centro era baja, una de las participantes comentó que este tipo de votación "llegó para quedarse" en un país donde el servicio en formato "drive-through", es decir, cuando el cliente o usuario está en su vehículo, es habitual en todo el territorio. Esta opción, sin embargo, no fue bien vista por todos los habitantes de Texas.
Sin ir más lejos, un juez federal estadounidense volvió a frenar el lunes una petición de los republicanos para que se anularan casi 127 mil votos emitidos por anticipado en Texas, a través del voto desde el vehiculo, después de un fallo similar del Supremo de ese estado.
En una semana en la que el país registró récords de nuevos contagios y la cifra de hospitalizaciones se mantiene en alza, se volvió imperiosa la necesidad de exigir el cumplimiento de estrictos protocolos para quienes se acercaron a votar. Estados Unidos es la nación del mundo con más casos de la covid-19, superando los 9,3 millones de contagios y 232.374 fallecidos, de acuerdo a los datos de la Universidad Johns Hopkins.
