El juicio por el doble crimen de David Campos y Emanuel Medina, asesinados tras una persecución policial en junio de 2017, entra hoy en una etapa decisiva hacia la sentencia contra 19 agentes. Después de dos meses de debate oral y público por el que pasaron un centenar de testigos, hoy se realizarán los alegatos de clausura en el Centro de Justicia Penal y está semana el Tribunal pondrá fecha al veredicto. "Sólo hay un relato posible de los hechos, desde la lógica y la razón: fue un fusilamiento, no un enfrentamiento", dijeron desde la querella el día que comenzó el juicio, en septiembre pasado. La acusación fiscal estuvo a cargo del fiscal Adrián Spelta, quien además de acusar por homicidio a dos de los imputados, el resto quedó implicado en un accionar de encubrimiento tendiente a simular que los pibes estaban armados y así justificar más de una docena de disparos que se produjeron en dos secuencias.

"Estamos muy cerca de la sentencia a los 19 oficiales santafesinos acusados de acribillar a David y Ema. Es el momento de plantarse frente a la justicia y gritar todos juntos 'basta de gatillo fácil'", reclamaron los familiares de las víctimas por las redes sociales, en una convocatoria a ser acompañados en la jornada de hoy.

En el transcurso de las audiencias de juicio que está a cargo del tribunal compuesto por Gonzalo López Quintana, María Trinidad Chiabrera y Román Lanzón hubo avances que fueron destacando desde la querella. A mediados de septiembre, con la reproducción del testimonio de dos policías imputadas en la causa, se incorporaron como elementos de prueba sus declaraciones de 2017, acerca de que los jóvenes estaban desarmados y que se buscó instalar la teoría del enfrentamiento. La querella destacó en su momento que se trató de un "quiebre en el pacto de silencio".

En tanto, expresaron que también quedó evidenciado el estado de salud mental que permitió avanzar en la acusación sobre el policía Alejandro Bustos --uno de los principales acusados--. Profesionales expresaron que “no presenta alteraciones morbosas que puedan dar como resultante una alteración de la comprensión del hecho".

Además de las familias de las víctimas y les abogades querellantes, la causa es acompañada por la Multisectorial Contra la Violencia Institucional, desde donde piden que el tribunal "esté a la altura de las circunstancias". Para la querella, los agentes actuaron "abusando del poder que les da el estado", y recordaron que les dispararon a los chicos cuando el auto ya había chocado contra un árbol en Arijón y Callao, y las víctimas estaban desarmadas.