La decisión está tomada. El pliego de Daniel Rafecas deberá esperar. El bloque del oficialismo avanzará en el Senado hacia la modificación de la ley orgánica del Ministerio Púbico Fiscal. “Primero la ley, después el pliego”, es la frase que se repite como mantra dentro del bloque que comanda el formoseño José Mayans.
“La ley de Ministerio Público Fiscal y el pliego de Rafecas van por carriles separados. Había un carril que no se movía y nosotros empezamos a mover el otro. Pero son dos temas distintos. Hay que modificar la ley del Ministerio Público, eso está claro para todos dentro del bloque. También está claro que vamos a respaldar al candidato del Ejecutivo para procurador, pero también es cierto que los dos tercios para Rafecas nunca estuvieron”, disparó uno de los senadores oficialistas que suele opinar sobre los temas vinculados a la Justicia que llegan al Parlamento.
La decisión del Frente de Todos es avanzar con el debate en Comisión a la espera del dictamen no vinculante que elaborará el Consejo Consultivo para el Fortalecimiento del Poder Judicial y el Ministerio Público, al cual el Presidente le encomendó el diseño de propuestas para mejorar el funcionamiento de la Corte Suprema, del Consejo de la Magistratura y para implementar el sistema acusatorio para el sistema penal y el juicio por jurados a nivel nacional.
En ese marco, los senadores dan por descontado que, como mínimo, el dictamen el comité asesor planteará la necesidad de terminar con el mandato vitalicio del Procurador General y esperan que en sintonía con esa modificación se abra el debate sobre la mayoría necesaria para avalar el pliego.
“Hay un amplio consenso en la necesidad de avanzar con una modificación en el Ministerio Público que va más allá de la bancada oficialista”, detalló otro de los hombres fuertes del bloque del Frente de Todos en temas judiciales y agregó: “entonces no podemos avanzar con una designación y a los dos meses modificar la ley por la cual se nombró a un nuevo Procurador. Lo lógico es modificar la ley y después tratar el pliego”.
El cronograma que manejan puertas adentro del bloque del Frente de Todos en el Senado apunta a obtener la media sanción del proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal antes de fin de año. Luego el debate pasará a la Cámara baja, donde el oficialismo deberá trabajar en la construcción de la mayoría para terminar concluir el trámite legislativo. Ante ese escenario Sergio Massa espera las indicaciones del presidente Alberto Fernández para definir si le imprime celeridad al proceso. El titular de la Cámara de Diputados acompañará a Fernández a la asunción del nuevo presidente boliviano Luis Arce y espera volver de ese viaje con una definición sobre el tema.
En tanto, dentro del trabajo que está realizando la Comisión de Justicia y Asuntos Penales de la Cámara alta que conduce Oscar Parrilli, el oficialismo destaca como un pequeño triunfo que la oposición haya legitimado el debate. Si bien es cierto que desde Juntos por el Cambio intentaron retirar los proyectos que habían presentado para modificar la ley orgánica del Ministerio Público, también es cierto que participaron de los primeros debates sobre la reforma. De hecho, la Comisión que se volverá a reunir esta semana para escuchar a distintos especialistas, algunos de ellos sugeridos por los senadores del PRO y de la UCR. La reunión que se llevará a cabo por teleconferencia contará con las exposiciones de Ricardo Toranzos, Vice Presidente Primero de Asociación de Fiscales y funcionarios del Ministerio Público Fiscal de la Nación; Mario Villar, fiscal ante la Cámara de Casación; Miguel Caminos, Exjuez del Tribunal Oral de la Nación; Néstor Pedro Sagües, Doctor en derecho por la Universidad de Madrid; y Marcela Basterra, Magister en Derecho Constitucional y Derechos Humanos, entre otros.
Más allá de las coincidencias sobre la necesidad de dar el debate sobre el funcionamiento del Ministerio público, el oficialismo y la oposición coinciden sin ninguna diferencia en el rechazo de las declaraciones extramuros que intentan imponer tiempos y formas para debatir el pliego del candidato a Procurador General enviado por el Gobierno. Ni los dichos de Daniel Rafecas, anunciando que declinará su candidatura en caso de que se modifique la mayoría necesaria para la aprobación de su pliego, ni los dichos de Carrió, conminando al bloque de Senadores de Juntos por el Cambio a apoyar la propuesta del oficialismo, cayeron bien en el Palacio Legislativo.
Desde el oficialismo describen a la posición pública de Rafecas como un desatino y al mensaje de Carrió como una provocación. “Ningún candidato a nada le puede decir a los senadores de la nación que representan las provincias cuando y como quiere que traten su pliego”, indicaron desde el Frente de Todos y remarcaron: “Lo de Carrió no ayuda, más bien hace todo lo contrario. Nosotros no podemos avalar el razonamiento que está detrás de lo que dice Carrió respecto de una supuesta búsqueda de impunidad por parte de la Vicepresidenta. Lo que hay que preguntarse antes de avanzar es por qué Carrió, que es (Eduardo) Casal y (Carlos) Stornelli, ahora sale a bancar a Rafecas”.