El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo este domingo que trabajará "con paciencia" para establecer canales de diálogo "decentes, sinceros y directos" con el presidente electo de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden. Maduro advirtió que el mandatario saliente, Donald Trump, dejó "un campo minado" entre Venezuela y Estados Unidos. El gobierno de Trump impuso a Venezuela fuertes sanciones financieras que incluyen un embargo petrolero vigente desde abril de 2019. En mayo pasado, fuerzas de seguridad venezolanas frenaron dos invasiones marítimas que se saldaron con al menos ocho atacantes muertos.
"Trabajaremos con fe, con paciencia, con las bendiciones de Dios, trabajaremos, ojalá, por retomar canales de diálogo decentes, sinceros y directos entre el gobierno futuro de Joe Biden y el gobierno legítimo y constitucional de Venezuela, que presido", dijo Maduro durante un acto transmitido por la cadena de televisión pública local, VTV.
Además de dejar en claro su intención de promover el diálogo con el próximo inquilino de la Casa Blanca, Maduro señaló que Biden cimentó su victoria electoral en la "esperanza de una inmensa mayoría" que persigue "el cambio" en Estados Unidos y el mundo.
Blanco de agresivas sanciones y bloqueos estadounidenses que buscan forzar su salida, Maduro rompió relaciones diplomáticas con Washington en enero de 2019, luego de que la administración Trump reconociera a Juan Guaidó, jefe del Parlamento, como presidente encargado. "Trump dejó un campo minado entre el gobierno de Estados Unidos y Venezuela (...), dejó un campo empantanado. Lo sé, lo sabemos", expresó el presidente venezolano, deseando que con la administración de Biden "se acabe el intervencionismo" estadounidense en América Latina.