La dirigencia de Unión sumó un nuevo escándalo. El presidente Luis Spahn reconoció que las obras de remodelación del estadio no se terminarán  a pesar de las promesas. "Estoy defraudado, te voy a explicar por qué. Se juntaron 15 arquitectos y me vendieron un buzón, me cagaron la vida. A todo Unión, nos re cagaron. 70 millones de pesos sale el hormigón que falta", admitió Spahn en un audio a otro dirigente. Pero la gestión de Spahn se sembró de dudas tiempo atrás, cuando el propio presidente aseguró que el club le debía tres millones de dólares que, supuestamente, había prestado para hacer frente a deudas. Y ahora dice que el proyecto que presentó para remodelar el 15 de Abril quedará sin terminar por mal cálculo de presupuesto.