El 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, un colectivo de mujeres del deporte presentarán en la Cámara de Diputados de Salta una propuesta de ley que pide la aplicación de la Ley Micaela en las instituciones deportivas.

Salta/12 dialogó con cuatro de ellas que consideran que con esta herramienta legislativa se gestan nuevos escenarios de mayor inclusión y participación de las mujeres y el colectivo LGBTIQ+. 

La docente de la Univesidad Nacional de Salta y becaria doctoral del Conicet, Mariana Ibarra afirmó que la ley es una herramienta fundamental dado que el deporte fue construido para un sector (los varones) dejando de lado a las mujeres. Su aplicación es necesaria además para repensar esos espacios, que tienden ser a binarios (varón/mujer) y en donde no se incluye a las disidencias.

"Poder capacitarse en perspectiva de género, en cualquier ámbito, viene a romper con estereotipos", destacó Ibarra que apoya la iniciativa que gestaron las referentes Victoria Liendro y Belén Morelli. "Se trata de una nueva construcción del deporte para todos, todas y todes", indicó.

La referenta trans y funcionaria de la Agencia de Mujeres, Géneros y Diversidad, Victoria Liendro aseguró que contar con las capacitaciones de la ley Micaela, llevaría a reconocer que las mujeres "siempre estuvieron presentes en la vida institucional del deporte". También, daría cuenta de que han sido escasos los espacios que garantizaron su participación más allá de las tareas del cuidado que también se trasladaron a la escena deportiva, como preparar a sus hijos para un partido de fútbol.

Liendro sostuvo que esta concepción es producto del pensamiento patriarcal y machista que siempre colocó a los varones como únicos beneficiarios. "El aporte de la ley Micaela trae más participación de las mujeres y del colectivo", destacó la militante trans. Eso llevaría a cambiar los mecanismos de los clubes para garantizar mayor presencia de las mujeres también en la toma de decisiones. 

Por su parte, la referente nacional de fúltbol femenino Mónica Santino destacó que plantear este debate en el deporte se encuentra en un momento justo "porque todo lo que tiene que ver con el derecho al género y al acceso al deporte forma parte del agenda de género". Consideró que desde el 2015, con la movilización del Ni Una Menos, se abrió una militancia feminista desde distintos lugares.

Por eso, dijo que presentar un proyecto de tal envergadura "es importante y resulta el instrumento que tenemos para la capacitación" en perspectiva de género. Aseguró que los estereotipos machistas que se sostienen en el deporte tienen que ver en gran parte con ignorancia, prejuicios y mitos en relación a los cuerpos. Consideró que se abre la posibilidad de deconstruir el deporte. 

En ese sentido, Ibarra aseguró que los ámbitos deportivos no fueron a la par con ciertos avances en materia de inclusión, como ser la ley de Identidad de género. Por ello, se busca incentivar a los espacios a que repiensen sus instituciones y sus propios reglamentos.

A modo de ejemplo, contó que se destacan situaciones de mujeres trans que tienen que judicializar sus casos para ser incorporadas en las disciplinas que desean. El resultado de la gran mayoría es positivo para ellas "porque no hay manera de que una institución deportiva vaya en contra de leyes nacionales". "Todos esos temas ya están en agenda y la ley Micaela puede ayudar a sensibilizar y pensar nuestras instituciones", reiteró.

La iniciativa legislativa que presentarán en dos semanas deberá contar con la firma de algún diputado para que pueda iniciar el circuito legislativo que culmine con su sanción.

Transformar las dirigencias 

Belén Morelli, ex jugadora de fútbol, fundadora y presidenta de la Asociación de Fútbol Femenino en la provincia, sostuvo que además de conscientizar, prevenir y erradicar la violencia en el deporte, este camino de capacitación daría mayor visibilidad a las mujeres en lugares de decisión porque "hoy hay pocas dirigentas" en Salta. 

"Soy presidenta de la asociación porque la realicé", cuestionó Morelli. En abril de 2018, nació la asociación que tiene como principal objetivo potenciar la participación de las mujeres y generar ámbitos de contención. 

Morelli lleva trabajando desde el 2016 con clínicas deportivas, que además de propiciar espacios de formación para las mujeres en el fútbol también brinda charlas de deporte y género. "Son muy importantes porque apuntamos a formar futuros entrenadores desde ese lugar", indicó. 

Contó que localidades del interior demandan la llegada de las clínicas, no sólo porque son necesarias sino porque "no hay muchas capacitaciones sobre ello". Esos espacios se vienen trabajando de forma conjunta con la Secretaría de Deportes de Salta. Además, cuentan con el aval de la Asociación Femenina de Fútbol Argentino (AFFAR).

La subsecretaria de Actividades Físicas, Deporte Social, Adaptado, Paralímpicos e Inclusivo de Salta, María Inés Bennassar afirmó que hablar de la ley Micaela implica traer el principio de igualdad al deporte. Además, se pone en eje el sentido comunitario que se manifiestan en las distintas disciplinas deportivas. 

Desde la creación de la asociación hasta hoy, la presidenta dijo que se pudo ver avances en los distintos espacios. A modo de ejemplo, recordó que recién el año pasado en plena Copa Argentina y con River en la provincia, se habilitó a que las mujeres puedan ser pasapelotas. "Sabemos que hay muchas mujeres que no tienen su espacio y por eso trabajamos", aseveró.

Sostuvo que el cambio que anhelan es "difícil" y "complicado" pero en definitiva "para eso estamos las dirigentas, para pelear y demostrar a nivel nacional que el interior está trabajando duro para competir". 

Repensar las masculinidades 

Mariana Ibarra aclaró que de aplicarse la obligatoriedad de las capacitaciones en perspectiva de género dentro del deporte, también se abordarían las construcciones en torno a las masculinidades. "Te da la posibilidad de repensar esas construcciones y desentramar sentidos" que tienen que ver con las oportunidades y los deseos. 

"Si un varón no quiere jugar al fútbol, que no lo haga y que nadie lo esté cuestionando. Y si una nena quiere jugar, que tenga la posibilidad de hacerlo", ejemplificó. Sostuvo que en ese caso, la creación de las escuelitas de fútbol femenino dentro de los clubes resultan iniciativas que van interpelando" y "nos enseñan que ya no hay vuelta atrás". 

Ibarra también forma parte del espacio "Pateando mandatos" que surgió en el 2018 como un proyecto de extensión de la Universidad Nacional de Salta. Allí se plasmaron inquietudes sobre la cobertura que hacían los periodistas y comunicadores en las prácticas de los deportes. "Nos llevaba a repensar esos discursos hegemónicos que eran sexistas", señaló. 

Por eso, brindaron distintas capacitaciones donde se planteó un escenario más equilibrado desde las propias prácticas comunicacionales. 

Liendro sumó que si se sostiene la premisa de que el deporte es parte integral del ser humano para el desarrollo de su salud y la sociabilización, es deber hacer de ese ámbito "un lugar amigable y permeable a lo que uno es". "Es vez de excluir, el desafío es hablar de políticas públicas en el deporte para ampliar la participación", señaló Liendro.