En Estados Unidos, un hombre fue expulsado del Parque Nacional Yellowstone por cocinar dos pollos en un géiser, un tipo especial de fuente termal que emite periódicamente una columna de agua caliente y vapor al aire.
El Yellowstone, ubicado principalmente en el estado de Wyoming, aunque también se extiende por Montana e Idaho, es el primer parque nacional de los Estados Unidos y recibe 4 millones de visitas al año.
Según informó East Idaho News, el hecho se descubrió cuando un guardabosques fue notificado sobre un grupo de personas que fueron vistas caminando con equipo de cocina hacia Shoshone Geyser Basin, en el área termal del parque.
Al salir a inspeccionar, el guardabosques no solo descubrió que las personas habían roto las reglas del parque al alejarse de los paseos marítimos y los senderos designados, sino que también habían roto la principal regla del parque, no colocar nada en los característicos géiseres: los infractores fueron vistos con una bolsa de arpillera con dos pollos y ollas de cocina, cerca de una fuente termal.
Uno de los hombres se declaró culpable y pagó dos multas de 600 dólares por violar las reglas del parque. Finalmente, fue puesto en libertad condicional sin supervisión por dos años, tiempo en el que no podrá volver a visitar Yellowstone.
Según aseguran los medios locales, este no es el primer caso de alguien que intenta cocinar un pollo en Yellowstone. En 2001, un programa de televisión fue multado por cavar un agujero cerca de un géiser para demostrar cómo el calor natural podía cocinar un pollo.
Un parque peligroso
El Parque Nacional Yellowstone es tan hermoso como peligroso: hay alrededor de 10.000 características geotérmicas, que van desde géiseres hasta ollas de barro y fumarolas. Según los registros, estas aguas termales han causado la muerte de al menos 20 personas.
El parque está lleno de letreros que advierten a las personas que permanezcan en los paseos marítimos y senderos designados para caminar, pero algunos infringen las reglas.
En 2017, un hombre cayó en una fuente termal hasta la cintura y sufrió quemaduras graves. En 2016, otra persona con el mismo accidente tuvo peor suerte y murió dentro de las aguas termales. En solo 24 horas, sus restos se habían disuelto por completo.
En mayo de este año, luego de colarse en el parque que estaba cerrado por la pandemia, una mujer también sufrió quemaduras tras caerse en una característica térmica mientras sacaba fotos.