La Copal, que nuclea a 35 cámaras del sector de alimentos y bebidas, volvió a manifestarse en contra de la política de Precios Máximos, a pesar de que el gobierno aprobó la reducción de la lista de artículos bajo control. "No se atiende a la crítica situación del sector, que desde marzo viene soportando un incremento promedio de sus costos del 26 por ciento, alcanzando subas de algunos de sus componentes superiores al 80 por ciento", indicó la entidad que dirige Daniel Funes de Rioja.
El programa de Precios Máximos fue lanzado junto con el comienzo de la cuarentena e incluye a los almacenes, autoservicios, supermercados chinos y grandes supermercados e hipermercados. Este jueves, la Secretaría de Comercio Interior exceptuó a un grupo de productos de la lista, sobre los cuales las empresas podrán aplicar aumentos de forma gradual. Según la explicación oficial, “son aquellos que tienen menor impacto y mayor oferta dentro de la canasta de consumo masivo”.
Sin embargo, las empresas alimenticias advirtieron que "que el sostenimiento de esta política pone en riesgo en lo inmediato el normal abastecimiento de los alimentos y bebidas en nuestro país, así como el cierre de empresas y la consecuente pérdida de fuentes de trabajo. Se insta al gobierno a que se convoque al diálogo para obtener una respuesta integral que permita revertir la situación y evitar el agravamiento de esta crisis sin precedentes", cierra el comunicado.