El anuncio de la creación de la autodenominada Mesa de Encuentro Libertador General San Martín, desató una serie de cuestionamientos y repudios de organizaciones políticas, sindicales y de derechos humanos. Por caso, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto afirmó que este agrupamiento "busca desestabilizar cuando estamos atravesando como país un momento difícil". La fuerte reacción provocó que las autoridades de las mutuales, federaciones y sociedades anunciaran su retiro y hasta el desconocimiento de este grupo de conspiradores. Anoche, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, lo confirmó al tuitear que "Para la buena salud de la Democracia y de las Fuerzas Armadas, la Mesa de Enlace Militar no se formó".
La serie de repudios que provocó esta mesa generó que durante la tarde del jueves fueran llegando cartas de las instituciones participantes al Ministerio de Defensa. Todas advertían que no integrarían este entuerto desestabilizador. La Sociedad Militar Seguro de Vida (SMSV) --organización que encabezó y brindó su sede para el encuentro-- envió una carta firmada por su presidente, Daniel Reimundes, donde asegura que "no formó ni formará parte de la mesa" y que tampoco financiará. Lo mismo hicieron la Mutual del Personal de Intendencias Militares (MUPIM), la Federación del Personal de las Fuerzas Armadas, de Seguridad y Policiales (FEMPFASP), la Asociación de Veteranos de Guerra de Malvinas y el Observatorio de Seguridad y Defensa de la Ucema. Todos niegan pertenencia y advierten que quienes participaron lo hacen a título personal.
"Las instituciones que estaban representadas en la Mesa de Enlace Militar y 5 de lo 6 militares retirados q participaron de la foto comunicaron por escrito q no participan ni participarán de la Mesa. El General Bossi (R), organizador de la reunión, dijo que no quiso hacer lo que hizo", escribió Rossi en Twitter y agregó: "Debut y despedida de la Mesa de Enlace Militar. En la Argentina del siglo XXI no hay lugar para estas ideas".
El único que no se había arrepentido fue el comandante Ricardo Spadaro, retirado de la Gendarmería y veterano de Malvinas. Spadaro rechazó las críticas de Rossi y afirmó que "nadie se va a apechugar". "Yo no me siento conspirador y voy a seguir opinando. Nadie me va a cerrar la boca. La condición de militar no me inhibe a opinar. Soy un ciudadano que va a seguir opinando, guste a quien le guste", indicó. Luego agregó que "el ministro Rossi, en algún momento, va a tener que pedir disculpas por lo que dijo".
El principal repudio provino de los organismos de derechos humanos que manifestaron en un comunicado su "enérgico rechazo" y preocupación ante la conformación del grupo de integrantes retirados de las Fuerzas y aseguraron que adhieren a las expresiones de Rossi sobre "el grado de alerta que provoca en nuestra sociedad". Para los organismos, entre los que se encuentran Abuelas de Plaza de Mayo, Madres Línea Fundadora, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por razones políticas, Familiares y compañeros de los 12 de la Santa Cruz, Hijos Capital, APDH y APDH La Matanza, LAPDH, Movimiento Ecuménico, Cels, Fundación Memoria Histórica y Social Argentina, Comisión Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte y Buena Memoria, "la democracia no admite una conducción paralela de las Fuerzas Armadas, como tampoco la intención de poner en duda a las instituciones que la dirigen".
Además, destacaron que un hecho como este "no puede ni debe ser naturalizado por quienes defendemos los derechos humanos ni por quienes comunican su puesta en funcionamiento. Instamos a quienes quieran aportar al fortalecimiento de la democracia a que lo hagan en las vías correspondientes, y a quienes tengan algún tipo de duda, a que recuerden que nuestro pueblo eligió Memoria, Verdad y Justicia para siempre".
El secretario de DDHH, Horacio Pietragalla Corti, aseguró que la creación de la mesa responde a una cuestión "ideológica y no salarial", y consideró que "no hará mella" en los actuales integrantes de las fuerzas porque "tienen otra cabeza". "Son dinosaurios que acompañaron los reclamos de genocidas y lo del salario es una excusa. Esto pasa por lo ideológico", subrayó.
Por otra parte, diputados del Frente de Todos, Frente Progresista Cívico y Social de Santa Fe y de Juntos Somos Río Negro, presentaron un proyecto para repudiar a los desestabilizadores y advirtieron que sus participantes buscan "conspiran contra la plena disciplina de nuestras fuerzas a las instituciones de la democracia".
En tanto, el secretario general de la CATT, Juan Carlos Schmid, rechazó el armado por constituir "una velada amenaza al sistema democrático" y respaldó al presidente Alberto Fernández. Además, la Corriente Federal de los Trabajadores advirtió que "cierta derecha pretende preparar su aventura desestabilizadora para quebrar el orden constitucional". Hugo Yasky, diputado y secretario general de la CTA, dio una "sugerencia" para los veteranos: "Dedíquense a disfrutar de las jubilaciones de privilegio que les pagamos entre todos los argentinos y déjense de joder".
Luis Tagliapietra, padre de una de las víctimas del Ara San Juan, indicó que esta mesa "tiene vinculación" con la convocatoria del Consejo de Guerra contra altos oficiales de la Armada por el hundimiento del submarino.