Me preguntan el otro día qué tiene Graná, que tampoco es pa´ tanto, así comenzaba un video publicado en 2016 por Marta Sánchez donde elogiaba Granada, la ciudad andaluza de donde es oriunda. La Alhambra, el barrio del Albaycin y sus miradores, Sierra Nevada, las tapicas, famosas en el mundo entero, que te pides una cervecica y tu tapa que parece un plato combinao, era parte del manifiesto a favor de su tierra de Sánchez, acompañado de histriónicos gestos.

El video se hizo viral en Granada, ciudad que no supera los 250 mil habitantes, por lo que al consolidarse en las redes sociales como Martita de Graná, cualquier granadino que se precie sabía quien era. Con un 85 por ciento de público femenino, hecho del que se siente muy orgullosa, afirma a Las12, Marta publicaba desternillantes videos, que variaban desde sus viajes, sus conversaciones con las amigas, desengaños amorosos o la masturbación femenina.

Martita de Graná incrementó su popularidad cuando comenzó la pandemia en España (actualmente cuenta con más de 1 millón de seguidores) y ahora empieza a hacerse famosa más allá de su país. ¿Quince días más?, Menos mal que estamos solteras, dice la Trini que está to el día peleándose con el marido, esos van a acabar mal. O Necesito desfogar, anda y vete a tu casa, sinverguenza; (donde miraba desde el balcón, haciendo alusión a las personas que violaban el confinamiento) son varias de las frases de sus videos, que con el boca a boca, la convirtieron en una de las humoristas más famosas del último tiempo.

La naturalidad y la capacidad de reírse de sí misma, junto a un humor muy popular, son parte de los ingredientes que usa la cómica para sus contenidos. "Yo no soy muy de arreglarme, ni de ponerme las mejores poses, es más, intento salir en los videos como voy, en pijama, sin pintar, incluso poniendo a veces caras desde abajo que se te ve más fea por el tema de la papada, yo siempre lo intento para reírme de mí misma y que las chicas vean que nos podamos sentir así" afirma. También hace videos donde trata de enfatizar la importancia de quererse, hecho que también expone en sus monólogos y que le han agradecido muchas personas. 

"Me lo agradecen día a día muchas chicas. Veo que hay chicos y chicas muy jóvenes que todavía no se quieren demasiado y creo que está bien que haya una persona que esté desde el otro lado de la pantalla diciéndole quiérete así" dice. En uno de sus últimos videos, Martita publicó un mensaje para los haters de las redes sociales: la humorista se solidarizó con una influencer a la que atacaron por haber engordado. También habla de los prejuicios sobre las mujeres humoristas: "Hay que empezar a demostrar y que se caiga ese mito de que las mujeres no somos graciosas”. La cómica subió hace dos meses "El día que Dios decidió hacerme", un video en el que hablaba con "El", en un diálogo interno, interpretaba a Dios y a su asistente personal decidiendo cómo sería Martita. Se va a llamar Marta, ponle ovarios, unos buenos ovarios, dignidad no mucha que así es más divertido ¿Mira que es pícara, eh Dios? reprochaba su personaje de asistente. Échale cerveza, a ver que pasa, empatía, sí, y cuando su ayudante le preguntaba por el físico Dios le contestaba que papada y frente, pecho poco y celulitis y culo, además de mala follá, un término que se usa en la ciudad, aludiendo al mal carácter de los granadinos. 

"Con la creatividad, la cantidad de tiempo libre que yo tenía juntando todo eso, el confinamiento para mí ha sido algo maravilloso", señala. Su carisma la ha conducido a rodar García y García, una película con José Mota y Pepe Viyuela, dos de los cómicos más famosos de España. "Mi acento es así. Es mi acento y ya está, siempre por mi bandera"