Michelle Viscomi, Mariana Díaz yTamara Pedraza son tres estudiantes del ultimo año de la carrera de Enfermería de la Universidad Nacional de la Matanza (UNLaM) que fueron convocadas por el Ministerio de Salud para viajar a Rio Negro y Neuquén, donde colaboraron con el personal médico en la realización de hisopados rápidos, en un contexto de aumento de casos en las provincias.
En Río Ngero, Viscomi y Diaz recorrieron a diario diferentes centros de atención médica que se encontraban en la periferia de la ciudad de General Roca. Por su parte, Pedraza realizó hisopados en un tráiler ubicado en el centro de la ciudad de Neuquén.
Algunos días antes de viajar para colaborar en el Plan DetectAR, las estudiantes se capacitaron en el Hospital Borda, donde diferentes profesionales les brindaron los conocimientos básicos para la realización de hisopados.
Las jóvenes que viajaron a Río Negro, y prestaron atención médica en diferentes pueblos de la provincia, aseguraron que el objetivo del Ministerio de Salud provincial fue "reducir la cantidad de personas que asistían al Hospital del distrito, López Lima". De esa forma, con la colaboración de las estudiantes, también el trabajo de los profesionales se alivió un poco, ya que durante las últimas semanas los contagios por COVID-19 aumentaron de forma progresiva.
Con relación a la metodología de trabajo, durante su estadía en cada una de las provincias, además de realizar hisopados, se encargaron de entrevistar a los pacientes para ayudar con el relevamiento de posibles cadenas de contagios.
Por otro lado, resaltaron el gran aumento de casos que se produjo en el interior del país, durante el último tiempo. "En este momento hacen falta muchos profesionales de la salud porque la demanda es muy alta y no están dando abasto en esas provincias", consideró Viscomi. En ese sentido, las estudiantes también mencionaron el "miedo" que supieron percibir en las personas que se acercaban a los centros médicos y se lo adjudicaron a la "sobreinformación".
"Todos los que se acercaron sabían cómo cuidarse, pero el exceso de información con relación a los síntomas, o incluso al procedimiento de testo, hacía que la gente sintiera miedo", aseguró Díaz.
Frente a esas situaciones, las estudiantes explicaron que tuvieron que apelar a la "empatía", como una de las herramienta fundamental que les inculcaron desde el inicio de su carrera en la UNLaM, y que las ayudó a generar confianza con los pacientes para un mejor procedimiento de los testeos.
Según manifestó Pedraza, la presentación ante el paciente "es algo básico y que no siempre se realiza". Desde ese momento el enfermero logra generar confianza con las personas, ya que, según agregó, "como profesionales tenemos que escuchar a las personas, explicarles qué les sucede, cómo deberíamos proceder y darles la posibilidad de decidir si quieren o no llevar adelante el tratamiento".
Es por eso que, pese a la cantidad de gente que se acercaba por día a los centros de atención médica, las estudiantes se tomaban un rato con cada persona para explicarles la situación y sacarles las dudas, según advirtieron al Suplemento Universidad.
Las estudiantes remarcaron que la Universidad siempre hizo foco en el buen uso de los materiales de protección personal, ya que de esa forma se evita la propagación del virus y hasta el contagio propio de cada enfermero.
En cuanto a sus colegas de cada provincia, destacaron que fueron "muy bien recibidas" y que el trabajo que realizaron fue "muy valorado" por todo el cuerpo médico. "Mis compañeros me hicieron sentir muy cómoda, son grandes profesionales y estoy planeando volver a trabajar en un futuro en Neuquén", destacó Pedraza.
"Los profesionales que nos recibieron fueron excelentes, nos incluían, nos cuidaban, y nos daban la posibilidad de opinar. Lograr un buen grupo de trabajo es importante, porque en salud tenemos que trabajar en equipo para la población", agregó Viscomi sobre su experiencia en Rio Negro.
Por último, las estudiantes de la UNlaM resaltaron la valoración que tiene la sociedad sobre la enfermería y remarcaron que "la carrera es mucho más que bañar a un paciente" y, en este sentido, resaltaron el "gran trabajo" que realiza este personal durante la pandemia.
En relación a esa reflexión, Pedraza resaltó que sin las herramientas teóricas y personales que recibieron de La Mtanza no hubieran podido llevar adelante la experiencia de colaborar en la asistencia médica del Plan Detectar.
En ese sentido, Diaz concluyó que "es importante recalcar que los enfermeros estamos considerados como personal administrativo y no como personal de salud", por lo que sostuvo que lograr "modificar eso sería una forma de valorizar nuestro trabajo y más aún en esta situación, donde estuvimos haciéndole frente a una pandemia mundial desde el primer momento".