La carrera contrarreloj para obtener la vacuna que permita tratar el coronavirus está cada vez más avanzada. Este jueves se anunció que el fármaco creado por la empresa estadounidense Pfizer y la alemana BioNTech podría comenzar a ser distribuida antes de fin de año en Estados Unidos y la Unión Europea (UE).
El presidente de BioNTech, Ugur Sahin, confirmó que mañana se presentará el pedido de autorización ante la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) y que "existe la posibilidad de que podamos obtener este mismo año la autorización en Estados Unidos o en Europa".
Pfizer anunció que su vacuna contra el coronavirus logró una efectividad del 95 por ciento, incluso en adultos mayores, un porcentaje superior al esperado.
"Los resultados del estudio marcan un paso importante en este histórico viaje de ocho meses para presentar una vacuna capaz de ayudar a poner fin a esta devastadora pandemia", señaló Albert Bourla, director ejecutivo de Pfizer.
A través de un comunicado Pfizer y BioNTech señalaron que "la eficacia fue constante según la edad, el género, la raza y la etnia", y destacó que "la observada en adultos mayores de 65 años fue superior al 94 por ciento". Un dato positivo si se tiene en cuenta que la franja etaria de los adultos mayores suele ser la más comprometida. Estos datos se suman a un detalle también promisorio: hasta la fecha, según los voceros, no se han detectado efectos adversos ni daños secundarios entre los voluntarios.
Días atrás, Moderna (EE.UU.) hizo lo propio y comunicó una efectividad del 94,5 por ciento y el Centro Gamaleya (Rusia) del 92 por ciento. Estos porcentajes se desprenden de resultados preliminares de los ensayos en fase 3 que todos los laboratorios en carrera difunden con el propósito de ganar credibilidad y conseguir en breve la aprobación de emergencia para sus candidatas.