El ministro de Economía, Martín Guzmán, participó de una reunión virtual de ministros de Finanzas del G-20 y jugó dos fichas fuertes: le pidió a los países líderes respaldo político para avalar la renegociación de la deuda con el Fondo Monetario (FMI) vía un programa sostenible; y a la vez contó detalles de las charlas con la misión del organismo. El dato más jugoso, una coincidencia de "todas las partes" sobre lo negativo y arbitrario del préstamos stand by que tomó la gestión de Cambiemos.
En la jornada titulada “La Economía global y el camino a seguir”, el ministro reclamó el "apoyo de los países miembros a la negociación que la Argentina está llevando a cabo junto al FMI para establecer un programa sostenible", informó el Palacio de Hacienda en un comunicado. Durante el encuentro, previo a la Cumbre de Líderes que se desarrollará este fin de semana bajo la presidencia de Arabia Saudita, el ministro agradeció “a todos los países del G20 por haber apoyado el proceso de reestructuración de la deuda argentina”.
En esa línea, Guzmán destacó que “el siguiente paso para resolver nuestra crisis macro y de deuda es el programa con el FMI, que reemplazará al acuerdo stand by que Argentina y el organismo firmaron en 2018”. Agregó además que "ahora también los necesitaremos, y les pido su apoyo en este proceso”, y resaltó las “negociaciones y el trabajo constructivo con el FMI”. Fue en ese contexto que deslizó críticas coincidentes entre el Fondo y el Gobierno Nacional sobre el crédito a Cambiemos. "Para todas las partes ha habido mucha frustración y enojo con el programa anterior", sentenció.
Según el ministro, "muchos de nosotros lo vimos como un préstamo político y afortunadamente todas las partes han estado mostrando un liderazgo muy positivo. Tanto Kristalina Georgieva como el presidente Fernández han ayudado a calmar la situación”, añadió.
Algunas pistas
La posición de Guzmán ante el G-20 dejó ver además algunos detalles de lo que se charló con la misión del organismo, que ya está en viaje a Washington. En cuanto al nuevo programa que se negocia con el organismo multilateral, explicó que “las políticas macroeconómicas tendrán que dar cuenta de la realidad que atraviesa el país. Tenemos que definir de manera muy cuidadosa las formas con las que decidimos resolver todos los desequilibrios, porque es urgente abordar los desequilibrios sociales”.
En relación con los procesos de reestructuración de deuda soberana, el ministro remarcó que “las cláusulas de acción colectiva modernas ayudaron, pero hay espacio para mejorar los marcos formales internacionales, y el equilibrio de poder entre los deudores soberanos en apuros y los acreedores”. “El acuerdo del G20 sobre la Iniciativa de Suspensión del Servicio de la Deuda (DSSI) es un hito importante y la Argentina apoya el marco común para ese tratamiento en la DSSI”, puntualizó.
Al respecto, sostuvo que “la Argentina seguirá trabajando dentro de los límites de las reglas de la arquitectura financiera internacional junto a todos los países del G20 para construir una economía mundial más resiliente e inclusiva”. “Permítanme agradecer a la Presidencia saudí por el liderazgo positivo durante este año. Le damos también la bienvenida a la nueva presidencia italiana, y les deseamos todo el éxito con los grandes desafíos por delante”, concluyó Guzmán.