El Gobierno avanza en su objetivo de normalizar el mercado de deuda en moneda local. En las primeras semanas de noviembre obtuvo financiamiento extra por 40 mil millones de pesos y consolida la dinámica lograda en los meses anteriores. Entre enero y octubre se pagaron casi 1,4 billones de pesos en vencimientos de títulos en moneda local y se colocaron unos 1,7 billones de nuevos títulos. Esto implica que la tasa de renovación de las deudas fue en promedio 122 por ciento.
El resultado le permite al sector público embolsar recursos extra para cubrir parte de la brecha fiscal que generó la caída de la recaudación debido a la crisis económica por la pandemia. Pero alcanzar estas cifras de renovación de la deuda no fue una tarea sencilla. El gobierno de Cambiemos dejó la confianza quebrada de los inversores de títulos en pesos.
El Tesoro enfrentó en el primer trimestre del año un fuerte desafío porque los inversores decidieron renovar sólo el 61 por ciento de los vencimientos de deuda. Puesto en otras palabras: entre enero y marzo vencieron títulos por 263 mil millones de pesos y el Palacio de Hacienda sólo pudo emitir nuevos bonos en moneda local por 143 mil millones de pesos.
Eso fue un efecto de la falta de credibilidad que había generado el reperfilamiento de bonos en los últimos meses de la gestión del macrismo. Pero la estrategia del Tesoro de apostar por la normalización del mercado de deuda en pesos sin ofrecer tasas de interés excesivas y alargando el plazo de los vencimientos fue efectiva.
En un documento de research sobre las oportunidades de inversión en deuda pública en moneda local de la agencia de bolsa Portfolio Personal se analiza que la relación de renovación para el segundo trimestre del año subió al 102 por ciento. Se pagaron 461 mil millones de pesos y se lograron nuevas colocaciones de deuda por 472 mil millones. En la jerga financiera esto se conoce como roll over.
En octubre la recomposición de la confianza del mercado de deuda en moneda local fue exponencial y la renovación de deuda marcó un pico de 247 por ciento. Es decir que se pagaron en vencimientos unos 170 mil millones de pesos y se colocó deuda nueva por 420 mil millones. Fue por lejos la tasa de roll over más elevada del año.
“Desde el segundo trimestre del año, el Gobierno viene logrando financiamiento neto positivo en el mercado de deuda en moneda local. Esto permitió que el Ministerio de Economía publicará un comunicado para adelantar que durante noviembre y diciembre no solicitará adelantos transitorios al Banco Central, apuntando a reducir la emisión (monetaria) a partir de la renovación total de los vencimientos de capital e intereses”, dijeron en Portfolio Personal.
En el mercado consideran que en el último bimestre del año el Ministerio de Economía deberá convalidar la buena performance en la gestión de la deuda registrada hasta el momento. Esto se debe a que estiman vencimientos de títulos por 340 mil millones de pesos en noviembre (de este total 161 mil millones en bonos y 179 mil millones en letras), mientras que en diciembre la cifra se eleva a 462 mil millones (403 mil millones en bonos y 59 mil millones en letras).
En las primeras semanas de noviembre el Tesoro ya comenzó a hacer su parte y logró renovar todo los vencimientos de títulos en moneda local al tiempo que consiguió recursos extra con los que se reduce la dependencia de la emisión monetaria. Con una agenda de licitaciones pragmáticas el Gobierno fue modificando los instrumentos de colocación de deuda para incluir no sólo bonos ajustados a la inflación sino títulos ajustados al tipo de cambio.
En octubre se emitieron dos bonos con esta lógica de dólar linked con vencimiento en 2021 y 2022. El primero recibió el equivalente a 1770 millones de dólares y el segundo a 1660 millones. En ambos casos el vencimiento se paga en moneda local.