Un bebé de 11 meses fue enterrado ayer en una de las comunidades originarias ubicadas entre Hickman y Dragones, en el departamento San Martín, tras fallecer en el Hospital San Vicente de Paul de Orán, ciudad cabecera del departamento homónimo.
El certificado de defunción indica un paro cardíaco como causa de la defunción, mientras que las otras dos causas de base informadas fueron deshidratación grave y trastornos metabólicos, además de un shock hipovolémico exotóxico. Al momento de nacer el bebé pesaba 2 kilos 300, y al fallecer, 8 kilos.
El bebé había nacido el 12 de diciembre de 2019, y el detalle del certificado indica “sin DNI”. Vivía en una de las comunidades del Pueblo Wichí ubicada en Dragones, ya en el límite entre los departamentos San Martín y Rivadavia, sobre la ruta nacional 81.
Su mamá tiene 18 años y el niño fallecido era su tercer hijo. Ella cuenta con el primario incompleto. Hasta allí los datos que surgen del certificado de defunción extendido en la institución sanitaria.
Teodoro Paz, presidente de la Asociación Manos Unidas y que es a su vez vocero de 14 caciques de comunidades ubicadas de la ruta 81, contó que el niño fue enterrado ayer en la comunidad de donde es oriundo su padre. Ese día la madre, siempre según Paz, fue en una camioneta de la Municipalidad hasta la comunidad, a ver a los familiares del padre de la criatura, quien hoy se encuentra detenido. El objetivo de la joven fue avisar que la criatura había fallecido. El aviso se debió que el nene nunca fue conocido por el padre (de 34 años), dado que el hombre fue detenido cuando la chica estaba embarazada.
El padre de los tres niños está detenido por abuso sexual. Y según el testimonio de Paz a Salta/12, se trataría de un abuso en la familia de su mujer, que a los fines prácticos se decidió en esta nota nombrar como María para poder resguardar su identidad. La madre de María (suegra del detenido), tendría también un hijo de su yerno y, al mismo tiempo, las dos hermanas de la chica, de 12 y 13 años, también habrían quedado embarazadas a raíz del abuso intrafamiliar.
Esta situación es la que habría desembocado en la detención del hombre de 34 años y, a su vez, generó el traslado de las mujeres a otra comunidad ubicada en Dragones. Paz aseguró que la familia paterna del bebé acusa al Estado por haber dejado sin contención alguna a María, cuando a entender de la familia del detenido podría haberse quedado en la comunidad donde vivía y tenía sustento para ella y sus hijos. “Ahora están preocupados por las otras dos criaturas”, añadió el referente de Manos Unidas.
Según la información que se pudo obtener hasta la noche de ayer de fuentes vinculadas al caso, la madre de María y sus hermanas fue quien decidió mudarse de comunidad y “hubo seguimiento y contención” del caso por parte de áreas del Ejecutivo provincial, dado que hubo una denuncia penal.