Leopoldo Luque, el último médico personal de Diego Armando Maradona, arribó a la Fiscalía de San Isidro para prestar declaración luego de haber sido imputado por el delito de homicidio culposo en la causa que investiga la muerte del Diez. Luque llega a declarar un día después de los allanamientos a su casa y su clínica, en procedimientos en los que se secuestraron computadoras, celulares y la historia clínica de Maradona.
Las primeras dudas sobre la atención que recibió Diego en sus últimas horas comenzaron a instalarse con la declaración de la enfermera Dahiana Madrid, quien aseguró que fue obligada a registrar que el director técnico de Gimnasia se negó a recibir un chequeo en la mañana de su muerte, pero nunca se realizó. Al conocer la imputación en su contra, Luque se defendió: "No hubo error médico. Diego tuvo un evento fortuito, un ataque cardíaco, es lo más común del mundo".
Otra persona que salió públicamente a defender a Luque fue el abogado Matías Morla --quien se ungió como representante y mano derecha de Maradona los últimos años--, quien publicó una declaración de respaldo hacia al médico que él mismo acercó. "Entiendo y comparto el trabajo de fiscalía, pero solo yo sé, doctor Luque, lo que hiciste por la salud de Diego, cómo lo cuidaste, acompañaste y como él te queria", dijo Morla.
Desde que se conoció la acusación por homicidio, Luque comenzó a despegarse de la responsabilidad sobre los cuidados que se habían montado en la casa del barrio "San Andrés", en el norte del conurbano bonaerense, donde el astro futbolístico pasó sus últimos días tras ser operado en la Clínica Olivos por un hematoma subdural.
Los operativos realizados este domingo en la clínica de Luque, ubicada en el barrio porteño de Núñez, y en su domicilio personal, en la localidad bonaerense de Adrogué, fueron ordenados por el juez de garantías de San Isidro Orlando Díaz, a partir del pedido de los fiscales actuantes John Broyard, Patricio Ferrari, Cosme Iribarren y Laura Capra.
Los allanamientos marcan un giro en la investigación sobre las circunstancias de la muerte de Maradona: en un primer momento la causa se caratuló como "averiguación de causales de muerte" y ahora seguirá como "homicidio culposo". Luque consideró "injusta" la imputación y aclaró que no se "reprocha nada" de su accionar previo a la muerte del ídolo argentino.
Uno de los momentos más importantes del descargo de Luque fue cuando se refirió a lo que ocurrió el miércoles antes del mediodía en el barrio "San Andrés" de Benavídez, donde Maradona se topó con la muerte.
"No hubo error médico. Diego tuvo un evento fortuito, un ataque cardíaco, es lo más común del mundo que termine así en un paciente. Es un hecho que le podía pasar, se hizo todo lo posible para disminuir ese hecho", aseguró.