Italia aprobó un paquete de estímulo de ocho mil millones de euros (unos 9.600 millones de dólares) para apoyar a los sectores más afectados por la pandemia, anunció el gobierno del primer ministro Giuseppe Conte. El lunes se reportaron 16.377 nuevos casos de coronavirus, debajo de los 20 mil diarios por primera vez en cinco semanas. De todas formas se mantendrá el toque de queda incluso durante los festejos de Navidad porque los efectos de la segunda ola todavía se hacen sentir. El gobierno quiere evitar a toda costa que se repita la situación del verano pasado, cuando los italianos se fueron de vacaciones creyendo que la batalla contra la covid-19 estaba ganada y no se respetaron debidamente las normas y protocolos de salud.
El paquete económico pospone los plazos para el pago de impuestos a las empresas de las regiones que se encuentran bajo las restricciones más severas y ofrece una asignación única de mil euros a los trabajadores del turismo, los balnearios, las artes y el deporte, que se vieron muy afectados por la pandemia.
El decreto aprobado por el Consejo de Ministros sirve "para ampliar y fortalecer el apoyo a los trabajadores, profesionales y empresas italianos, que no deben sentirse solos ante las dificultades que plantea esta crisis", publicó el ministro de Finanzas, Roberto Gualtieri, en su cuenta de Facebook. "Estoy seguro de que saldremos todos juntos en breve", agregó. El paquete también proporciona fondos para las fuerzas militares y policiales.
Italia es el octavo país del mundo con más contagios, una cifra que alcanza los 1.601.554, mientras que la de decesos ronda los 56 mil. Si bien los casos parecen haber entrado en una meseta, la segunda oleada de covid-19 no deja de alarmar a las autoridades. Basta pensar que cerca de la mitad de los contagios confirmados en el país durante toda la emergencia se localizaron en el último mes.
Por eso, el gobierno italiano ya trabaja en un nuevo decreto con restricciones que sustituya al vigente, que expira el jueves. Algo que no cambiará será el toque de queda nacional a partir de las 22 horas, ni siquiera durante la Navidad y la Nochebuena, confirmó este lunes el ministro de Asuntos Regionales de Italia, Francesco Boccia. "Si decidimos que hay un límite horario para los desplazamientos, que se vuelve a casa independientemente de lo que haya que hacer, ¿se celebra Nochebuena? Se celebra en casa", declaró Boccia a la cadena pública RAI.
A la espera de que el gobierno decida esta semana sobre las restricciones que se impondrán en las próximas semanas, Boccia se mostró partidario de mantener la prohibición de desplazamientos entre regiones. "Aquí de lo que se trata es de dar prioridad absoluta a la defensa de las redes sanitarias. No creo que nadie quiera una tercera ola", remarcó.
En la misma línea el presidente de la asociación de médicos italianos (FNOMCeO), Filippo Anelli, advirtió que los hogares deben celebrar la Navidad "con prudencia". "En Navidad, las medidas restrictivas implementadas por el gobierno seguramente habrán enfriado la curva de contagio. Pero esto no significa que ya está todo superado: el virus sigue circulando, y de una manera mucho más fuerte que en el verano, cuando salimos de dos meses de bloqueo total ", aseguró.
