El Presidente resolvió prorrogar el período de sesiones ordinarias hasta el 11 de diciembre y convocar a sesiones extraordinarias con un temario amplio desde el 12 de diciembre hasta el 28 de febrero. La decisión se conoció anoche, sobre el filo de la finalización de las ordinarias y mientras sesionaba la Cámara de Diputados, con el Frente de Todos intentando avanzar con los proyectos del Gobierno y la oposición macrista de Juntos por el Cambio apelando a todas las estrategias posibles para bloquear la agenda del oficialismo, tal como viene ocurriendo durante todo el año: en este caso, el interbloque opositor jugó sus cartas por fuera del Palacio Legislativo para buscar sin éxito que el FdT no reuniera el quórum para sesionar y no tratara ni convirtiera en ley el proyecto que recorta el aumento extraordinario de la coparticipación federal que el ex presidente Mauricio Macri le otorgó por decreto al gobierno porteño al traspasar parte de la Policía Federal a la CABA. 

Luego de que el FdT lograra el quórum, el macrismo planteó más de 40 cuestiones de privilegio reclamando sesiones “presenciales” e innumerables pedidos de apartamientos del reglamento en busca de llegar a la medianoche para que cayera la sesión en el último día de ordinarias. Con la prórroga decretada por el Presidente, al cierre de esta edición la Cámara baja continuaba sesionando.

El recorte de los fondos extraordinarios coparticipables que recibe la Ciudad de Buenos Aires era el punto más controvertido de la convocatoria de ayer. El proyecto que ya tiene media sanción del Senado establece el monto que se le asignará a la CABA, por el traspaso de parte de la Policía Federal, retirando los recursos extraordinarios que 2016 el presidente Mauricio Macri le otorgó al distrito por decreto, llevando la coparticipación federal del 1,4 por ciento al 3,75 (luego bajó al 3,5). Así, la Ciudad volverá a recibir el 1,4 por ciento que le corresponde por coparticipación federal, más la compensación económica que establece la ley por el traspaso de la Federal.

Juntos por el Cambio se trazó entonces como estrategia sabotear la sesión. Buscó infructuosamente que el oficialismo no lograra el quórum. Con el aporte de los diputados del interbloque Federal para el Desarrollo, la mitad del bloque de Córdoba Federal (Paulo Cassinerio y Alejandra Vigo), la izquierda (Nicolás del Caño), la neuquina Alma Sapag, y el riojano Felipe Alvarez (que abandonó el interbloque opositor), el oficialismo logró abrir la sesión poco antes de las 14.

Un cuarto intermedio de 15 minutos no logró disipar las diferencias. La vicejefa del bloque del FdT, Cecilia Moreau, pidió modificar el orden del día para tratar en primer lugar la rebaja de coparticipación a la CABA, pero el macrismo se negó y exigió que la modificación se realice por dos tercios de los presentes, algo que no cuenta el oficialismo.

Luego, 35 diputados de JpC se anotaron para solicitar una cuestión de privilegio. La mayoría de ellas, dirigidas para cuestionar al presidente de la Cámara, Sergio Massa, por la convocatoria “repentina” y con “solo 48 horas de anticipación” a sesionar en el último día de sesiones ordinarias, además de reclamar sesiones “presenciales”. Los argumentos fueron desde afirmar que las sesiones remotas son el “Massapaloosa”, que con ese sistema el oficialismo solo busca el “quórum automático”, pasando por la supuesta “utilización de la pandemia” y la “eterna cuarentena” para “imponer” su voluntad y hasta intentaron comparar al oficialismo con la última dictadura militar por “cerrar el Congreso”, como lo expresó la macrista salteña Virginia Cornejo.

Otro macrista, Waldo Wolff, reclamó que se documente que el pedido para sesionar se haya realizado antes de las 17 horas del viernes, porque si no sería “ilegítima” para avanzar con “el robo a la Ciudad de Buenos Aires” y el mendocino Omar De Marchi pidió que se mostrara la convocatoria con la firma de los diputados certificadas y con la hora que se registró para reclamar “inválida” la sesión. Las cuestiones de privilegio se extendieron con expresiones contra el presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta CFK y el tratamiento “exprés” de la legalización a la Interrupción Voluntaria del Embarazo.

La oposición macrista continuó su estrategia de dilación con múltiples pedidos de apartamiento del reglamento para reclamar la incorporación de sus propios proyectos al temario. Todos fueron acompañados con el pedido de votación nominal, donde la mitad de los diputados de JpC no expresaban su voto a través del sistema remoto, lo que obligaba a repaso de la lista uno por uno. La sesión se prolongaba. Diez horas después de iniciada no se había tratado ningún tema de los que originalmente eran parte de la sesión.

Ninguna de las concesiones que hizo el oficialismo logró destrabar el bloqueo opositor. El FdT ofreció acompañar el tratamiento sobre tablas el pedido de la oposición de los proyectos de sobre “Alimentación saludable”, sobre el etiquetado frontal de alimentos, y transformar en ley la prórroga por cuatro años de beneficios para biocombustibles, que el Senado aprobó por unanimidad y que prevé beneficios impositivos para los productores de las 54 plantas asentadas en diez provincias argentinas. Ni los propios macristas votaron a favor de sus pedidos. La estrategia era dilatar la sesión hasta después de la medianoche, cuando suponían que vencía el plazo para sesiones ordinarias y el protocolo de sesiones virtuales mixtas que firmaron todos los bloques.

Una hora después de conocido el decreto presidencial que prorrogó hasta el 11 de diciembre las sesiones ordinarias, las dilaciones opositoras continuaban en la Cámara baja y el oficialismo estaba decidido a avanzar después de la medianoche con el temario de la sesión.

Aborto y grandes fortunas

El decreto del Poder Ejecutivo que convoca a sesiones extraordinarias desde el 12 de diciembre hasta el 28 de febrero incluye un amplio temario de proyectos. En la agenda se destacan los proyectos de Interrupción Voluntaria del Embarazo, el proyecto de apoyo a mujeres embarazadas conocido como de "Los Mil días", el aporte extraordinario de las Grandes Fortunas y también la iniciativa que retrotrae la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires al nivel previo a la cesión de fondos decretada por Mauricio Macri. También aparecen en el temario la reforma de la fórmula de movilidad jubilatoria, la reforma de la justicia federal, la ley de financiamiento del sistema científico, la ley de Consenso Fiscal, la ley de Etiquetado Frontal de Alimentos y la ley de Manejo del Fuego, entre otros proyectos. De esta manera, el Congreso de la Nación no se tomará vacaciones sino que el trabajo parlamentario empalmará sin interrupciones con el período de sesiones ordinarias del 2021, que comenzará el 1 de marzo del año que viene.