El proyecto del Ejecutivo porteño para construir un barrio premium con edificios que irán de los 18 a los 28,8 metros de altura en los predios de Costa Salguero y Punta Carrasco, en la Costanera Norte, a 450 metros del aeroparque Jorge Newbery, recibió un duro golpe. Este martes se conoció el informe de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que rechazó el emplazamiento del desarrollo inmobiliario con las alturas proyectadas. La iniciativa indicaba que la construcción de edificaciones en ese predio debía contar con la aprobación de la máxima autoridad aeronáutica, que en su dictamen sostuvo que se "vulneran los límites de altura establecidos por la superficie de ascenso en el despegue a pista 13", y se vulneran "los límites de altura establecidos por la superficie de protección al sistema de iluminación de aproximación (ALS) a pista 31", entre otras impactos negativos sobre los que advirtió.
El Informe realizado por la ANAC a pedido de la administración de Horacio Rodríguez Larreta y firmado por la titular del organismo, Paola Tamburelli, sostiene que el emplazamiento de edificaciones en doce manzanas, con alturas máximas variables, como parte de un proyecto denominado “Parque Salguero - Distrito Joven”, para ser desarrollado en el predio delimitado por la Avenida Costanera Rafael Obligado, el canal de desagüe del Arroyo Ugarteche y el Río de La Plata, no es viable tal cual fue proyectado por los ganadores del Concurso Nacional de Ideas: Buenos Aires y el Río "Parque Salguero". Un concurso hecho a la medida, según denunciaron las organizaciones que se oponen al proyecto.
El análisis que realizó el organismo que, entre otras funciones, tiene que garantizar la seguridad operacional en el espacio aéreo, señala que además de las vulneraciones antes mencionadas, también se constató un elevado indice de ruido que generaría molestias a las personas expuestas, así como un mayor riesgo de accidente aéreo.
En este sentido, el texto señala que "corresponde advertir a las autoridades locales, alertando acerca del riesgo que representa para los terceros superficiarios, la instalación de conjuntos habitacionales que reúnan un gran número de personas, dentro de las áreas próximas a las cabeceras de las pistas, como asimismo de los índices de molestia y perturbaciones que causa el ruido de las aeronaves en las personas expuestas al mismo",
En cuanto al ruido, el informe advierte que del estudio "surge que la huella de ruido, tomando el nivel de ruido límite para zonas residenciales estipulado en la Ley 1540/2004 Control de la Contaminación Acústica en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, excede los valores límites, tantos diurnos como nocturnos. (Informe técnico 045-EANA).
Con relación al riesgo de accidentes aéreos, advierte que "en la proximidad del aeropuerto, corresponde advertir a las autoridades locales que el nivel real de riesgo en los alrededores de los aeropuertos es quizá más elevado de lo que podría esperarse. Si bien la probabilidad de un accidente por vuelo es muy pequeña (normalmente en el orden de 1 en 1 000 000), los accidentes tienden a ocurrir principalmente durante las fases de despegue y aterrizaje, es decir, cerca de los aeropuertos".
En su conclusión, Tamburelli afirmó que "en razón de las afectaciones detalladas a las superficies de despeje de obstáculo del aeropuerto Buenos Aires/ Jorge Newbery, no se autoriza el emplazamiento (del emprendimiento) en la zona y con las alturas proyectadas".
Si bien el informe de la ANAC fue tomado como un hecho positivo por las diversas organizaciones sociales, ambientales y de protección urbana, además de vecinos y vecinas de la ciudad que se oponen al proyecto, también advirtieron que no sólo no es un golpe definitivo al proyecto sino que el riesgo es que se corra el eje del debate.
Al respecto, el abogado y titular del Observatorio del Derecho a la Ciudad, Jonatan Baldiviezo, dijo a Página/12 que "el dictamen es bueno y peligroso al mismo tiempo. Es bueno que la ANAC manifieste algo obvio, que es peligroso construir este emprendimiento inmobiliario en esta zona. Lo malo es que empecemos a discutir qué se puede construir y qué no, cuando lo que venimos diciendo es que no se puede privatizar la Costanera. El Gobierno lo que va a decir es que "la ANAC no nos deja hacer este proyecto, vamos a sentarnos con la ANAC y presentar un proyecto que se adecue".
Como anticipó el abogado, fuentes de la Secretaría de Desarrollo Urbano a cargo de Álvaro García Resta, que elaboró el proyecto de ley de rezonificación y lo presentó en la Legislatura porteña, dijeron a Telam que "a partir de su respuesta, nuestros especialistas van a tener discusiones técnicas con la ANAC para, si fuera necesario, adaptar el proyecto".
Baldiviezo remarcó "están a tiempo de modificar la capacidad constructiva que está autorizando y readecuarlo y sabemos, porque hay edificio en la zona, que hay un cierto estándar que la ANAC, en algún momento, va a permitir. Por eso el eje tiene que ponerse en la privatización, los terrenos ribereños deben ser públicos como lo establece la Constitución de la Ciudad", remarcó el letrado.
Las palabras de Baldiviezo entroncan con lo que dijo por la tarde el docente y secretario general de la CTA de la Ciudad, Eduardo López, al abrir su intervención en la tercera jornada de la audiencia pública en la Legislatura porteña para tratar la rezonificación del predio, en la que hay más de 7000 anotados para opinar sobre el proyecto, por lo que se espera que las exposiciones duren hasta el 27 de enero. Tras señalar que quienes lo precedieron ya dieron todos los argumentos a favor de que la Costanera no se privatice, López leyó unas pocas palabras: "Los espacios que forman parte del contorno ribereño de la Ciudad son públicos y de libre acceso y circulación". Son "diecinueve palabras, el artículo 8 de la Constitución (porteña)", dijo el docente que preguntó, antes de embestir contra Martín Lousteau, "¿qué no se entiende, Larreta?".