Con exposiciones a favor y en contra del derecho al aborto legal, seguro y gratuito, este martes comenzó en la Cámara de Diputados de la Nación el debate en comisiones del proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) enviado al Congreso por el Ejecutivo nacional. Sobre la base de la discusión de 2018, cuando en comisiones hubo más de 700 intervenciones, 20 expositores sentaron posición en un debate que cerrará el viernes, cuando está previsto que los diputados y diputadas emitan dictamen.
"En 2018 no se perdió, se despertó a la juventud, el derecho a la IVE es autonomía, libertad e igualdad". Así comenzó su intervención Nelly Minyersky, abogada e histórica referente de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, cuyo proyecto también es debatido junto con el del Ejecutivo. En el marco de la primera reunión informativa del plenario de las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Mujeres y Diversidad, y Acción Social y Salud Pública, Minyersky aseguró hablar en nombre de las "decenas de miles de mujeres que han luchado durante décadas".
Para articular el debate actual con el proceso que en 2018 --cuando en comisiones hubo 724 exposiciones que están disponibles en la web de Diputados-- terminó con la media sanción de la Cámara Baja y el rechazo del Senado, la militante de la Campaña recordó que, en aquel entonces, dijo a los diputados y diputadas "que tenían la posibilidad de entrar en la historia". "Se trata de ampliar derechos, no obligamos a nadie, pero no queremos que nos cercenen derechos y libertades", señaló ahora e invitó a quienes participan de la discusión a "dejar de lado las creencias y pensar que estamos legislando para millones".
La intervención de Minyersky llegó luego de que el cura Pepe di Paola abriera la jornada con una exposición en la que se refirió a un "intercambio de cartas con el Papa Francisco" en el que el sumo pontífice le manifestó que el "no al aborto" debe ser "una postura científica, donde se decida si hay vida o no". En base a esto, Di Paola sostuvo que el embrión "posee ADN único que se mantiene toda la vida", por lo que consideró que el aborto es "la eliminación de una vida" y realizó la siguiente comparación: "Después del Nunca Más muchos se preguntaban cómo se pudo haber llegado a tal grado de deshumanización, la respuesta es que se llega cuando se decide justificar la eliminación de la vida", dijo.
Di Paola también recurrió a la comparación con el nazismo: "Los países capitalistas que han aprobado el aborto han depurado, con un pensamiento cuasi nazi, al 90 por ciento de los niños por nacer con síndrome de Down", sostuvo. Para concluir, el sacerdote se preguntó: "¿Después de este cuál es el próximo paso? ¿La eliminación de los ancianos disfrazada con el eufemismo de muerte digna?". Osvaldo Carnival, pastor de Catedral de la fe, coincidió en que "el aborto siempre es asesinato".
Al igual que en 2018, el argumento de que el embrión es vida desde el día cero cruzó las intervenciones de todos los expositores en contra del derecho al aborto, derecho que tanto el proyecto enviado por el Ejecutivo como el de la Campaña prevén garantizar hasta la semana 14 de gestación.
Frente a ese argumento, el abogado y ex ministro de Justicia Ricardo Gil Lavedra afirmó que "no hay legislación en el mundo que sostenga esa hipótesis", y explicó que, en términos jurídicos, "la protección de la vida es incremental y en todos los casos hay que confrontar esa tutela con los derechos de la madre, en las primeras semanas de gestación prevalece la voluntad de la madre".
Además, Gil Lavedra indicó que "tratar de equiparar a un niño con un embrión es un argumento retórico con un envoltorio legal que procura mantener una criminalización que ha fracasado y que impide la llegada de las mujeres al sistema de salud". Tanto el ex ministro de Salud de la Nación Adolfo Rubinstein como la actual ministra bonaerense de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual, Estela Díaz, coincidieron en este sentido en que el aborto es una cuestión de "salud pública". Díaz agregó que "pocas leyes posibilitan un cambio en la vida de las mujeres de manera tan inmediata como esta".
Otro de los argumentos esgrimidos tanto por Di Paola como por Andrea Imbroglia, representante de Cáritas y de la Conferencia Episcopal Argentina, fue que "las mujeres pobres no quieren el aborto". Imbroglia incluso pidió que "a las mujeres que quieran abortar y son pobres, envíenlas con nosotros". Ante la siguiente consulta de la diputada Silvia Lospennato: "¿Considera que no hay mujeres vulnerables entre las cerca de 40 mil que registra la estadística oficial de hospitalizadas en el sistema público por complicaciones derivadas de aborto?", Imbroglia respondió que la tarea de Cáritas "no es el manejo de estadísticas".
De la primera jornada de debate, que se extendió hasta cerca de las 20 horas, participaron 10 oradores a favor y 10 en contra, mientras que en la reunión del miércoles, que se iniciará a las 10 de la mañana, serán 15 por cada posición. Así se completará la lista de 50 expositores prevista para que, entre jueves y viernes, los diputados y diputadas busquen dar dictamen al proyecto de ley.
Informe: Santiago Brunetto