El gobierno conservador de Uruguay anunció una dura serie de restricciones que apuntan a contener la escalada de contagios de coronavirus en ese país. Se suspendieron los deportes en lugares cerrados, se puso tope horario a los bares y restaurantes y se promovió la aplicación del teletrabajo en las oficinas públicas y privadas, entre otras medidas.
La aplicación de las nuevas disposiciones será ultimada hoy en una reunión con los gobiernos departamentales. Luego, el Gobierno evaluará los resultados hasta el 18 de diciembre, y si la curva de contagios continúa en ascenso se declarará el “alerta naranja” y podrían anunciarse nuevas medidas.
El anuncio fue hecho por el presidente Luis Lacalle Pou, luego de mantener una reunión con el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) que asesora a su administración sobre la pandemia.
A fin de aminorar la circulación de personas, entre las medidas se incluyeron más controles en el transporte público y, si bien no se suspendieron las clases presenciales, se cancelaron los actos escolares de fin de curso.
"El teletrabajo en todas las oficinas públicas, cancelación de todos los deportes en ámbitos cerrados, incluyendo el básquetbol, el cierre de bares y restaurantes y afines a la medianoche y se aplicarán multas a lugares de trabajo que no cumplan con protocolos", afirmó Lacalle Pou en rueda de prensa.
Las multas serán de 60 dólares por cada persona que asista a reuniones masivas que no cumplan los protocolos de distanciamiento. Los bares y restaurantes, en tanto, deberán cerrar a la medianoche, y los que no cumplan con el horario podrían ser clausurados, según se indicó.
"El objetivo ahora es frenar el crecimiento"
El objetivo es no perder la “zona amarilla” en la que se encuentra el país y no agravar la situación a “zona naranja”, lo que ocurrirá si el promedio semanal de casos diarios supera los 300.
Fernando Paganini, responsable del área de datos y modelo del GACH dijo que actualmente ya no está al alcance volver rápido a la zona verde de contagios, como se planteó como objetivo el gobierno el 5 de noviembre, debido al aumento de los casos.
"El objetivo ahora es frenar el crecimiento", explicó el integrante del grupo de 55 científicos uruguayos, que hizo un estudio que establece que de continuar la tendencia actual de crecimiento. "El promedio semanal superaría los 300 (casos) y antes de fin de año estaríamos llegando al naranja de Harvard", una antes de la roja, la máxima, añadió.
El sábado y domingo pasados Uruguay superó por primera vez los 200 casos diarios desde que se detectó la enfermedad en el país el 13 de marzo, al registrar 208 infectados cada uno de esos días. Se contagiaron hasta el momento 6.024 personas y fallecieron 78 por la enfermedad, según el reporte de hoy del estatal Sistema Nacional de Emergencias.
El parámetro surge de la aplicación del esquema de Harvard, la universidad estadounidense que estableció cuatro niveles: verde, en el cual Uruguay se mantuvo desde el comienzo de la emergencia sanitaria; amarillo, que es la zona en la que ingresó en los últimos días, con entre 1 y 10 casos cada 100 mil personas; naranja, de 10 a 25 cada 100 mil; y rojo, más de 25 cada 100 mil.