El cantautor español Paskual Kantero, alias Muerdo, tenía que tocar el 18 de marzo en el patio de la Ciudad Cultural Konex. Llevaba vendidas 3000 anticipadas. Pero el recital nunca se hizo porque dos días después arrancó la cuarentena, que lo dejó varado entre Buenos Aires y Bragado, donde vive su novia. "Yo también soy de un pueblo rural, así que no me costó tanto adaptarme a Bragado", cuenta el artista nacido en Ribera de Molina, una pequeña ciudad de 2000 habitantes en la región de Murcia, en el sudeste de España, donde se encuentra ahora.
Su estadía en Buenos Aires fue muy productiva: lanzó dos adelantos y se dedicó a producir su quinto disco, que saldrá en marzo de 2021. Mientras tanto, mañana a la noche tocará en el Festival Capital, un evento vía streaming abierto y gratuito que se desarrollará el 3, el 4, el 10 y el 11/12, y en el que participarán artistas internacionales como Julieta Venegas, Frente Cumbiero o Carlota Urdiales, y locales como Bandalos Chinos, Santiago Motorizado, Mel Muñiz, Sara Hebe o Villa Diamante.
Hace ya un tiempo que Muerdo gira por América latina. El año pasado agotó entradas en más de 10 de los 29 conciertos que dio en Argentina, Chile, Uruguay, Colombia, Perú y México. En octubre de 2019, cuando estaba por dar un show en Santiago, tuvo como telón de fondo las multitudinarias protestas en Plaza Baquedano; y dice que se alegró mucho al ver algunas de sus letras en las pancartas de los manifestantes. Desde entonces, Muerdo ejerce una militancia activa en distintas causas, como la lucha de los pueblos originarios en toda la región.
"Hay una necesidad de emancipación de ciertos modelos que no fueron construidos por la gente sino que son importados. Hace falta reconstruir las instituciones para sentirnos realmente identificados", explica. Y jura que en América latina "se está dando una efervescencia que ojalá contagiara a España".
Las calles y las huertas del mundo
Los discos de Muerdo recorren un arco de canción latinoamericana y mestizajes varios (la impronta de Manu Chao es inconfundible), desde candombe uruguayo hasta ritmos andinos y tropicales con sonidos electrónicos, a los que se suma una pizca –muy sutil– de flamenco. Algunos dirán que tiene una forma de cantar parecida a la de Pau Bonés, cantante de Jarabe de Palo, quien falleció en junio pasado.
El último lanzamiento de Muerdo, Yo pisaré las calles nuevamente, es una versión candombeada del tema escrito por Pablo Milanés en 1974, un año después del golpe de Estado contra Salvador Allende en Chile. "Es una canción que da un mensaje de esperanza, que dice que volveremos a tener cultura, felicidad y paz... desde el '74 que eso no ha sido posible", analiza el cantante.
El anterior adelanto fue La sangre del mundo, en el que definió las coordenadas musicales y conceptuales del próximo disco, el quinto de su carrera. Los anteriores son La mano en el fuego (2018), Viento Sur (2016), Tocando tierra (2013) y Flores entre el acero (2011). Este año se publicó también un álbum con versiones acústicas, llamado Fin de la primera vida, en el que aparecen feats con Perotá Chingó, Sofía Viola y Amparanoia, entre otros artistas.
En el nuevo disco, Muerdo eligió trabajar con Diego Pérez (Tonolec, Nación Ekeko) y seguir investigando ritmos andinos y tropicales mixturados con sonidos electro-étnicos. "Fue muy importante trabajar con Diego, que es de Chaco, muy próximo a la cultura Qom, lo cual también se ha visto volcado a mi música", explica el cantautor. También tiene un nuevo feat con Perotá Chingó ("una copla medio bagualera", dice), a partir de textos de Martín Fierro y José Martí. Y también colabora Chancha Vía Circuito.
Muerdo vivió los últimos 11 años en Madrid, pero la pandemia lo hizo volver a su pueblo, como quien regresa a la casa de sus viejos. "Me arreglé una casita antigua y estoy cerca de mi familia. Es bueno hacer base y estar cerca de los tuyos en un lugar tranquilo, con una huerta y animales", cuenta Muerdo. Y avisa que va a tratar de venir a la Argentina para fin de año. Ahora ya sabe que, si queda varado otra vez en Buenos Aires o Bragado, quizá termine sacando un sexto disco.