El Gobierno de Francia anunció este miércoles que subvencionará diez días de vacaciones pagas a les trabajadores de los sectores más afectados por la pandemia de covid-19: bares, restaurantes, discotecas y gimnasios.
El único requisito, aclaró, es que sean tomadas entre el 1 y el 20 de enero, fechas en las que este tipo de establecimientos, de acuerdo con las estimaciones oficiales, seguirán cerrados.
La medida abarcará a empleades de las empresas que hayan visto interrumpida su actividad de forma parcial o total al menos 140 días a lo largo de 2020 o que en ese periodo hayan sufrido una reducción de ingresos de más del 90%, indicó el Ministerio de Trabajo.
Podrán recibir la ayuda cafés, restaurantes, gimnasios y discotecas pero también "hoteles que no estaban obligados a cerrar pero que, a causa de la falta de clientes por las restricciones de desplazamientos, también se han visto obligados al cierre", agregó la cartera a través de un comunicado.
A la espera de la vacuna
Las medidas de apoyo a los sectores más golpeados llegan mientras el país atraviesa la segunda ola de coronavirus, como sucede en gran parte de Europa. Esta semana, sin embargo, los franceses recibieron con entusiasmo los planes de vacunación anunciados por el presidente Emmanuel Macron.
Según explicó el mandatario este lunes en una conferencia de prensa, la vacunación masiva en el país comenzará entre abril y junio de 2021, luego de una "primera campaña destinada a los grupos más vulnerables y expuestos" que tendrá lugar los primeros meses del próximo año.
Esta semana, además, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) recibió los pedidos de autorización de las farmacéuticas Moderna y Pfizer/BioNTech, que pretenden vender sus vacunas en el continente los primeros meses del 2021. La petición ante el organismo regulador europeo se produjo después de que las empresas solicitaran la aprobación en Estados Unidos.
