El Barcelona de Lionel Messi, con cuatro partidos ganados, dos empatados y cuatro perdidos de los diez jugados hasta el momento, registra el peor inicio de Liga de España de los últimos 33 años, destaca este domingo el diario deportivo catalán Sport.
Desde la temporada 1987/88, Barcelona no había iniciado tan mal en la Liga como ocurre en la actual campaña, bajo el mando del neerlandés Ronald Koeman. Aquel equipo de hace tres décadas, comandado por Luis Aragonés, registró cuatro triunfos, una igualdad y cinco caídas -todas ellas consecutivas- en las primeras diez jornadas del torneo. Entre sus filas se encontraban algunos ilustres como el delantero inglés Gary Lineker, el alemán Bernd Schuster, el paraguayo Raúl Amarilla y el arquero Andoni Zubizarreta. Esa temporada, Barcelona finalizaría sexto, a 23 puntos (todavía se otorgaban dos unidades por partido ganado) del campeón Real Madrid de Emilio Butragueño y el mexicano Hugo Sánchez.
En lo que va de siglo, el club catalán solamente tuvo un inicio tan "patético" -según el informe de Sport- en dos ocasiones: 16 puntos en la temporada 2000/01 con Lorenzo Serra Ferrer en el banco y 15 puntos en la 2002/03 con el neerlandés Louis Van Gaal.
Después de los 10 primeros partidos de la 2020/21, el equipo que dirige Koeman ocupa la séptima posición con 14 puntos y a 12 del líder Atlético de Madrid con los mismos encuentros disputados. Barcelona, que viene de caer por 2-1 ante Cádiz este sábado, enfrentará el martes como local a Juventus por la Champions League en busca de asegurarse el primer puesto de su grupo, ya que los catalanes tiene 15 unidades y los de Turín, 12.
"La distancia respecto al Atlético de Madrid es muchísima", declaró Koeman tras la derrota del fin de semana, a la que definió como un "grandísimo paso atrás". "Es dificilísimo explicar los goles que hemos encajado. Puede venir porque falta concentración, en el partido nos faltó agresividad cuando no tuvimos el balón, no es fácil explicar cómo hemos encajado ese segundo gol", agregó.
Con espalda por su buen pasar en la Champions, donde ganó los cinco partidos que disputó, Koeman finalizó: "Perdimos los partidos y ganamos juntos, el entrenador tiene mucha importancia en el resultado final, hay que asumir y no se puede criticar, no hemos estado suficientemente bien para ganar el partido. Hay que reconocerlo y hay que aceptarlo".