El presidente de Bolivia, Luis Arce, advirtió que los militares involucrados en la represión que dejó más de treinta muertos en distintas protestas contra el golpe de Estado del año pasado no podrán evadir su responsabilidad. "Quiero decirles de manera muy sincera a las Fuerzas Armadas que no es posible eludir la justicia, que como gobierno y Estado boliviano estamos obligados a contribuir proporcionando la información para esclarecer las muertes en la pasada gestión", dijo Arce durante un acto militar.
El mandatario, que presidió la graduación de oficiales de alto rango de la Armada, hizo así su primera alusión a un comunicado del alto mando castrense, de fines de noviembre, que declaraba "desconcierto" militar por la decisión judicial de procesar a un general de la Fuerza Aérea por su papel durante la masacre de Sacaba cometida el 15 de noviembre 2019.
Arce dijo que las Fuerzas Armadas, y en general todas las instituciones del Estado, deben colaborar con la investigación que realiza actualmente un grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre las masacres que siguieron al golpe contra el expresidente Evo Morales.
Para Arce, que cumple un mes en la presidencia de Bolivia, el gobierno de facto encabezado por Jeanine Áñez "lamentablemente mal utilizó a las Fuerzas Armadas enfrentándolas al pueblo boliviano".