La intendenta Bettina Romero puede anotar un logro relevante en su primer año de gestión: por temor o convicción, sus funcionarios no ofrecen una sola fisura en el manejo de la información.
Así es que el presupuesto municipal del próximo año es todavía un misterio absoluto, pero la jefa comunal reclamó que la Provincia no incluyó en su presupuesto fondos para obras para capital, como sucede históricamente.
Los datos preliminares con las cifras gruesas globales acerca de los ingresos previstos, el estimado general de erogaciones, la composición del gasto en obra pública y el porcentaje de un eventual incremento en la Unidad Tributaria, que suelen manejarse a cierto nivel público, antes que el proyecto ingrese al Concejo Deliberante, esta vez se manejan en absoluta reserva.
Nadie en el Ejecutivo Municipal se atreve a saltar las normas de un estilo rígido que requiere de autorizaciones y avisos previos para cualquier contacto de prensa. Hasta la propia intendenta evita dar precisiones.
De sus explicaciones se desprende que la demora en los datos podría obedecer a que efectivamente, los borradores del anexo que corresponden al Plan de Obras Públicas tienen absolutamente vacío el ítem Fondos Provinciales, al tiempo que los casilleros para montos surgidos de Rentas Generales del municipio y Fondos Nacionales, son muy modestos para las necesidades de la ciudad.
“El presupuesto lo está trabajando ahora la provincia, a partir de allí lo vamos a presentar nosotros”, dijo la intendenta el martes a la noche, durante una entrevista en vivo, en la señal local de Telefe, durante el informativo central, ocasión en la que repasó el año de gestión
“Hemos logrado que el presidente Alberto Fernández, que el gobierno nacional, nos acompañe con recursos, porque la Municipalidad que yo administro, a la que llegué hace casi un año, es una Municipalidad en la que casi el 80% de lo que tiene de presupuesto se va en gastos y costos operativos, de sueldos del Concejo Deliberante, del Tribunal de Faltas, del Tribunal de Cuentas, en otros gastos, queda muy poco porcentaje para invertir en obra y a pesar de eso tuvimos 100 frentes de obras municipales y en plena pandemia, con un plan concreto de lo que la ciudad necesita, conseguimos $400 millones”, dijo.
Reclamo
Usando un ritmo expositivo que casi no permite interrupciones, la jefa comunal deslizó halagos e inmediatamente reclamos al gobierno provincial.
“El desafío que tenemos ahora es lograr seguir consiguiendo recursos y que también el gobernador, que conoce mejor que nadie esta ciudad, porque tenemos la buena suerte que el actual gobernador acaba de terminar de ser intendente y Gustavo (Sáenz) conoce mejor que nadie estas necesidades. Entonces estamos trabajando para que incluyan obras de la provincia en la ciudad, como históricamente se hacía. Los gobernadores y la provincia, acompañaban con obras de rutas, de autopistas”.
“Me interesaría que en el presupuesto de la provincia aparezca la Capital. Por ejemplo, no hay pavimento previsto por parte de la provincia para capital, y sí para San Lorenzo. Allí es donde yo tengo que hacer un trabajo mayor para que el gobernador y sus ministros destinen inversión en Salta”, sostuvo.
Después precisó que en Salta hace falta pavimentar 4.000 cuadras, pero que el presupuesto municipal solo permite pavimentar 100, y afirmó que históricamente la Nación y la Provincia ayudaban, "de hecho el Presidente nos está acompañando; acabamos de licitar obras por $100 millones para pavimento, acá hay un Presidente que nos acompaña como ciudadanos salteños, que eligió a la ciudad de Salta, para destinar recursos para obra pública. Insisto, como capitalinos tenemos la gran ventaja que quien gobierna la provincia era el intendente. Eso es algo genial! No solo es un compañero, amigo, con quien trabajo y hemos trabajado para llegar, sino porque tenemos como gobernador alguien que conoce mejor que nadie, porque el no solo fue intendente cuatro años, sino vino trabajando en el municipio como concejal y sabe de lo que hablan los vecinos, del reclamo histórico de los barrios, de lo que falta, de la cantidad de barrios que en la zona norte no tienen todavía conexión de agua o en la zona sudeste, en barrios que se hicieron hace 10 o 15 años y después nunca más nadie invirtió en pavimento, en iluminación y hoy se nota”.