Bob Dylan vendió todo su catálogo musical a la compañía Universal. El grupo gestor de publicaciones de la compañía discográfica adquirió los derechos de autor sobre más de 600 canciones del músico estadounidense, que abarcan 60 años de carrera. El catálogo, que en el pasado era gestionado por Sony/ATV Music Publishing, incluye canciones que van de “Blowin’ in the Wind” (1962) a “Murder Most Foul”, editada este año. Aunque los términos de la venta no fueron revelados, una fuente cercana asegura que se trata de un monto cercano a los 300 millones de dólares.

A los 79 años, Dylan disfruta de un status de pionero en el mundo de la música. Desde el lanzamiento de su primer disco en 1961, vendió más de 125 millones de unidades en todo el mundo, y sus canciones han sido grabadas más de 6 mil veces. En 2016 fue el primer compositor en ser galardonado con el Premio Nobel de Literatura por "crear nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición americana de la canción". Su más reciente disco, Rough and Rowdy Ways (número 39 de su carrera), fue lanzado en junio de este año. 

En un memo interno enviado al equipo de Universal Music Group, el CEO de la compañía Lucian Grainge comentó la compra: "Los grandes compositores reconocen la autenticidad, y gravitan hacia las compañías que honran su creatividad y, a su turno, generan un verdadero valor para su trabajo. Y eso es exactamente lo que sucedió aquí, por nuestra increíble compañía... una de esas oportunidades que solo aparecen una vez en la vida se ha convertido en realidad." En un comunicado público, en tanto, Grainge agregó que "no es ningún secreto que el arte de la composición es una llave fundamental a la buena música, y no es ningún secreto que Bob Dylan es uno de los más grandes practicantes de ese arte".

La directora ejecutiva de Universal Music Publishing Group, Jody Gerson, señaló que "representar el cuerpo de trabajo de uno de los más grandes compositores de todos los tiempos, cuya importancia musical no puede ser subestimada, es a la vez un privilegio y una responsabilidad". Ni Dylan ni nadie en su representación hizo comentarios sobre la venta.