El colectivo LGBTIQ realizará la primera Marcha del Orgullo en Rosario de Lerma el próximo 12 de diciembre a las 18, concentración en la plaza Evita, para visibilizar la diversidad sexual en la localidad y la necesidad de que les reconozcan sus derechos. En ese camino reclaman que funcione una Secretaría de Género y Diversidad, el cupo laboral trans y la Ley Micaela, aprobadas por el Concejo Deliberante pero sin reglamentación.

La referenta, Mar Morales, contó a Salta/12 que se autoconvocaron de manera independiente para hacer la marcha. "Antes hicimos los aportes a la concejal para los proyectos de cupo laboral tras y de una Secretaría de Género y Diversidad y la adhesión de la Ley Micaela. Se aprobó en el Concejo Deliberante en agosto pero no se implementó", indicó.

"Pedimos que se haga oficial la apertura de la Secretaría y que se decida el personal que va a trabajar (en virtud del cupo laboral trans)", añadió.

Morales relató que es difícil "declararse" gay, traba o lesbiana "en un contexto machista" como el del pueblo de Rosario de Lerma. "Es una comunidad pequeña, las más visibles son las identidades trans femeninas. Creo que para las identidades trans masculinas es más fácil insertarse en un trabajo, aunque puedo equivocarme", expresó.

Contó que en el pueblo hay 4 mujeres trans que son enfermeras pero ninguna consigue trabajo. "Tienen sus familias que las pueden aguantar. Si fuese otra la situación, esas chicas ni siquiera llegan a estudiar", indicó.

"Tenemos una compañera en situación de calle. Está abandonada. Como vecina puedo hacer algún aporte pero no mucho más", relató Morales, quien por ello señaló la importancia de la presencia del Estado.

Señaló que aún existe una discriminación muy marcada "por las burlas y los insultos", como formas de violencia generadas hacia la diversidad sexual. "No creo que concretemos la eliminación pero no somos un chiste, no somos una burla" y eso es lo que quieren visibilizar con la marcha del orgullo, sostuvo.

La referenta dijo que en el pueblo hay 6 varones trans "a quienes les cuesta identificarse" de ese modo. Precisó que pocas personas del colectivo LGBTIQ son visibles y entienden la temática de género. "Pronunciarse y nombrarse tiene sus riesgos como el rechazo de la familia", sostuvo. "A algunas les daba vergüenza hablar con otra persona del colectivo. Entendemos que tienen sus procesos", manifestó.

Morales señaló que en Rosario de Lerma no tienen espacios de consultoría de salud sexual y reproductiva o no reproductiva para la diversidad. Tampoco tienen acompañamiento en lo que hace al proceso de cambio de identidad de género.

Durante la pandemia, el colectivo trans travesti comenzó a organizarse cuando el municipio comenzó a entregar módulos alimentarios. "Recibimos críticas a favor y en contra" por parte de los vecinos y vecinas, sostuvo Morales. "Nos tuvimos que empoderar y hacer frente a toda esa violencia. Porque somos merecedoras de cosas que el Estado no se está ocupando".

Este 12 de diciembre el colectivo LGBTIQ de Rosario de Lerma convoca a acompañar la marcha a los vecinos y las vecinas que aspiran a una sociedad más igualitaria "más critica, moderna, actualizada y que respete las diferencias". "El lema es que no se trata de tolerancia, se trata de respeto", indicó Morales.

La joven también dijo que los medios de comunicación deben dejar de reproducir discursos discriminatorios. "Algunas veces en las entrevistas me tratan de él. Por suerte estoy bien parada, puedo hacerles frente y corregir", contó. "Todavía los medios hablan de trans como gays, si no dicen que somos los degenerados, antinaturales. Somos todavía la burla, eso es violencia", añadió.

Morales dijo que la marcha surgió por la necesidad de que la gente cambie la perspectiva, y asuma la del respeto por los derechos humanos, "Nos pesaría menos el sufrimiento a una infancia o adolescencia que está en ese proceso de ser quien quiere ser", expresó.

Como en otros lugares, tras la exclusión, hay personas trans que recurren a la prostitución como medio de subsistencia, pero para Morales, "a muchas les gustaría probar otras opciones que no sean la prostitución. La mitad sobrevive de la prostitución".