Como en mayo, los representantes de los 31 Centros de Jubilados, Clubes de Ancianos y Asociaciones de la Tercera Edad del interior provincial, denunciaron que este mes no les llegaron las ayudas en alimentos para las personas con más necesidades que provee la Provincia a través del Ministerio de Desarrollo Social.
“Nos están discriminando a los del interior porque los de Capital ya recibieron”, dijo Nelly Zelarayán, presidenta del Centro de Jubilados Nueva Esperanza, de General Mosconi. También afirmó que ningún otro Centro del departamento General San Martín recibió la ayuda y que desde el Ministerio no les informaron qué sucedía ni cuándo se entregaría, “si es que lo hacen”, y agregó que en la semana se comunicó con una secretaria de la cartera de Desarrollo Social, “pero no sabía nada”.
Para Zelarayán, los ignoran como históricamente se hizo desde el gobierno provincial con los habitantes del interior. Solo en el espacio que preside, tiene 35 personas que aún están esperando esa ayuda “para pasar un poco mejor el mes”, pero hay al menos dos clubes de Ancianos más en el municipio que reciben la misma cantidad, “en el departamento son 14 centros, de los cuales, según PAMI, algunos reciben 70 módulos”.
Sarmiento ratificó que lo mismo pasa en toda la zona sur de la provincia, “ni El Tala, ni Metán aún tienen información de cuándo llevarán la mercadería”, dijo, y añadió que también deberían mandar el bolsón navideño, “no sé si van a enviar los dos juntos o nos van querer conformar con uno solo”, especuló. El referente de los adultos mayores de Rosario de la Frontera sostuvo que esta semana intentará ponerse en contacto con la titular de Desarrollo Social, Verónica Figueroa, aunque también informó que desde la Casa del Encuentro de Vaqueros “están haciendo una nota formal a la que adheriremos todos los demás centros de jubilados".
Justamente, la presidenta de ese Centro de Jubilados, María Teresa Dufau, contó a este medio que ellos también recibían 35 módulos y que este mes no llegaron, “sin embargo, sí lo hicieron para los que viven en la ciudad de Salta”, manifestó sorprendida.
Los tres referentes consultados aclararon que el PAMI sí está cumpliendo a través de la nueva modalidad que adoptó en la etapa de aislamiento de la pandemia por el coronavirus. La obra social de los jubilados les deposita mensualmente $1.600 en compensación por el bolsón y para que no salgan de sus casas, y para Navidad les llegará un bono que varía según la zona. “En Mosconi será de $950”, contó Nelly Zelarayán.
Desde el Ministerio de Desarrollo Social, tras algunas consultas, comunicaron que en el transcurso de esta semana saldrían las camionetas a recorrer todos los puntos del interior provincial registrados entregando los módulos alimentarios.
Recortes de bolsones
Durante el primer conflicto ocurrido en mayo, la Coordinación General de la cartera contestó que el programa de emergencia PAS (Plan Alimentario Salteño), que lanzó el ex gobernador Juan Manuel Urtubey en 2019, y que preveía la entrega de 18.000 módulos para adultos mayores, se había discontinuado primero por la emergencia socio sanitaria en el norte provincial y luego debido a la pandemia.
Un mes más tarde, el gobierno provincial decidió dar marcha atrás debido a la emergencia económica que estaba atravesando gran parte de la población, pero esta vez los bolsones llegaron con recortes. Todas las centros donde se nuclean jubilados aseguraron que de más de 100 que recibían hasta diciembre del año pasado, comenzaron a percibir sólo un tercio, es decir, un promedio de 35 por centro.
“Nosotros tuvimos que comenzar a elegir a los más carenciados y dejar afuera a muchos que verdaderamente también necesitan”, contó Oscar Sarmiento, presidente del Centro de Jubilados de Rosario de la Frontera. De los 18.000 módulos que contemplaba el PAS para los adultos mayores, los referentes sostuvieron que no se entregaron ni siquiera 6.000 en el mejor momento. Los beneficiarios de los alimentos, son personas que quedan afuera de la ayuda que da el PAMI a sus afiliados y que cobran la mínima.