Estudiantes salteños del Instituto de Innovación y Tecnología Aplicada (IITA), ganaron por tercera vez el certamen nacional de robótica Roboliga. Esta vez el equipo ganador estuvo integrado por Alejandro Ugarriza, Máximo Cansino y Máximo Rivero, quienes tuvieron que programar un robot, al que llamaron Titán, a través del lenguaje Python y usando Open CV para el reconocimiento de imágenes.
El desafío consistía en que el robot tenía que atravesar un laberinto donde debía procesar y decidir a dónde ir bajo las coordenadas de los estudiantes.
Debido a la pandemia y la imposibilidad de movilizarse entre las provincias, este año la temática estuvo vinculada a la programación y los salteños obtuvieron el mayor puntaje, con 549 puntos. La victoria ya los clasificó para el cercamen mundial Robocup, que se desarrollará en Francia el año que viene.
La docente y coordinadora educativa del IITA, Cecilia Budeguer, afirmó que los sorprendió el primer puesto porque precisamente se cambió la modalidad de participación, que pasó, de ser presencial, a distancia y se reemplazó un robot físico por uno virtual. En este caso se contó con una plataforma de simulación Webots, que realizaron los organizadores de la Robocup 2021 y que resultaba desconocida para los salteños.
La plataforma era "muy compleja" y por eso, "nos ha sorprendido la victoria, sobre todo, por la edad de los chicos", que tienen entre 14 y 16 años. "Debían programar con lenguajes complejos", que el Instituto empezó a implementar con más presencia recién a raíz de la pandemia, dijo Budeguer.
Durante estos meses de aislamiento y clases a distancia, los adolescentes tuvieron que trabajar bastante sobre la programación y por eso, la coordinadora dijo que "es destacable su empuje". También porque ninguno de los tres estudiantes cursan su secundario en una escuela técnica de Salta sino que asisten a la institución desde que tenían 8 o 9 años.
Para la coordinadora, los 549 puntos obtenidos, representan el "resultado de un proceso del desarrollo de la lógica en la programación". Señaló que esa profesionalización en los conocimientos suelen darse en chicos de Alemania, China o Japón, que mantienen esos estudios con mayor antelación que Argentina.
"Fue algo realmente muy bueno y el propio jurado lo destacó por el programa que armaron", agregó. Se espera que el próximo año, los estudiantes puedan viajar a Francia a competir en la categoría de Jr Rescue Simulation.
No obstante, Salta no estará representada únicamente por el trío, sino que se sumarán José Menéndez, Gerónimo González y Joaquín Galván Tejerina, quien junto a Máximo Cansino, que también participó en este certamen virtual, ya habían ganado la compentenica de 2019. Allí debían fabricar un robot que tenía que atravesar un circuito con obstáculos.
Debido a la pandemia, la competencia mundial que se tenía que llevar a cabo en julio de este año, se suspendió y se reprogramó para 2021. El cuarteto participará en la categoría Jr Rescue Line.
Los salteños ya habían participado del mundial de robótica que se llevó a cabo el año pasado en Australia, tras la victoria nacional de 2018. "Siempre participamos porque la competencia nacional los motiva mucho; además, porque pueden compartir con otros chicos de otras provincias", dijo la coordinadora.
Adquirir conocimientos en pandemia
Debido a que el Instituto mantenía su fuerte en la creación de robots de competencia, las clases se daban de manera presencial. Pero cuando llegó la pandemia de la covid-19, la reformulación del dictado tuvo que volcarse directamente a la virtualidad.
"Ahí nuestros alumnos empezaron con robótica simulada y a medida que íbamos avanzando con ellos, se cambiaban los contenidos", contó Budeguer. Esto para que adquieran mayores conocimientos en el tema. La coordinadora aseguró que no hubo deserción en el establecimiento y que se mantuvo el número de estudiantes con respecto a años anteriores porque asisten desde muy pequeños.
El Instituto desarrolló este año un encuentro latinoamericano de robótica que llamaron Open Roberta y después participaron en distintos eventos internacionales, en México y Paraguay. "Pudimos ver que con la virtualidad podíamos estar en contacto con otros y eso resultó muy valioso y productivo para nuestro instituto", manifestó su coordinadora.
Desde hace unos meses también trabajan con estudiantes de Bolivia, Perú y del interior de Salta, lo que los llevó a definir que la virtualidad será una modalidad "que vamos a continuar haciendo porque hay chicos que la prefieren, así como otros prefieren la presencialidad", indicó. "Las dos cosas son buenas", agregó.