El Producto Interno Bruto registró una caída interanual de 10,2 por ciento en el tercer trimestre, según informó el Indec. El dato positivo es que experimentó un rebote de 12,8 por ciento con respecto al segundo trimestre, cuando se implementó la cuarentena más rígida.
La mejora registrada en comparación con el trimestre anterior contrasta con la caída del 16 por ciento observada en el segundo trimestre en relación al primero. Aquel fue el peor momento de la cuarentena, cuando se buscó frenar la expansión del coronavirus y solo quedaron habilitadas las actividades esenciales. Si bien durante el segundo trimestre las restricciones se fueron flexibilizando gradualmente, el golpe sobre la actividad fue fortísimo.
En el tercer trimestre la situación fue diferente porque se inició el camino hacia una normalización de numerosas actividades, lo que quedó reflejado en esta suba de 12,8 por ciento contra el trimestre previo. Igual la comparación interanual da cuenta de una brusca caída que recién comenzará a revertirse en el último trimestre donde algunos sectores ya registraron subas interanuales.
Desde el Ministerio de Economía aseguraron que “en la comparación interanual se redujo casi a la mitad la caída del mercado interno hasta -10,2 por ciento interanual luego de haberse registrado una caída del 19,0 por ciento interanual en el segundo trimestre”.
Por su parte, la caída acumulada en los primeros nueve meses del año del Producto Bruto Interno se ubica en 11,8 por ciento y es una comparación contra el acumulado de los primeros tres trimestres del 2019.
En el Palacio de Hacienda mencionaron un conjunto de elementos que permiten observar que –tras el impacto inicial en el segundo trimestre- la economía comenzó a mostrar señales de recuperación.
Aseguraron que el crecimiento está siendo apuntalado por la inversión, el consumo de familias y empresas y el gasto del Estado para sostener la demanda agregada. “En la medición sin estacionalidad, el crecimiento del tercer trimestre fue impulsado por la Inversión (42,9 por ciento), el consumo privado (10,2 por ciento) y el consumo público (2,7 por ciento)”, precisaron.
En la cartera a cargo de Martín Guzmán agregaron que “en el frente externo, las exportaciones netas contribuyeron negativamente a la actividad”. Se registraron bajas de las exportaciones del 1,4 por ciento y crecieron las importaciones 10,9 por ciento.
Uno de los elementos destacados de la información del tercer trimestre del año es que permite observar que la mayoría de los componentes de la demanda agregada desaceleraron su ritmo de caída interanual respecto de las pérdidas interanuales del trimestre previo.
El consumo privado cayó 14,7 por ciento (contra la baja del 22,3 por ciento del segundo trimestre), en tanto que la inversión cayó 10,3 por ciento (contra el 38,3 por ciento) y el consumo público se contrajo 6,5 por ciento (contra 8,8).
Por el lado del frente externo, las exportaciones cayeron 17,0 por ciento interanual (contra el 13,6 por ciento del trimestre previo) y las Importaciones se contrajeron 22,0 por ciento (contra el 30,5 por ciento del período anterior). Como resultado de esta evolución, las exportaciones netas aportaron positivamente al Producto Interno Bruto.
Al mirar los datos de la actividad por el lado de la oferta agregada, se destaca que crecieron en el tercer trimestre y en forma interanual los bloques de intermediación financiera (4,6 por ciento) y electricidad, gas y agua (2,3 por ciento). A su vez, entre los sectores que retrocedieron, la mayoría desaceleró su tasa de caída respecto al segundo trimestre.
“Los servicios con mayor retroceso fueron nuevamente los hoteles y restaurantes (con una merma del 61,5 por ciento interanual) y otras actividades de servicios (53,8 por ciento), aunque ambos desaceleraron su caída respecto del segundo trimestre en 11,4 y 13,7 puntos porcentuales, respectivamente”, dijo Hacienda.
En esta lista de bloques que moderaron su baja puede destacarse también la Construcción, que cayó 27,0 por ciento (contra el 50,2 por ciento del trimestre anterior). Se subraya también la fuerte desaceleración de la caída de la Industria (-5,3 por ciento interanual contra el -21,0 por ciento del trimestre previo) y del comercio (-2,1 por ciento contra -17,3 por ciento). En tanto, los Impuestos cayeron 10,1 por ciento y transporte y comunicaciones bajó 21,7.
En el equipo económico llevan adelante una estrategia coordinada para recuperar la producción del mercado interno, al mismo tiempo que se garantiza la sostenibilidad en el frente financiero y cambiario. El objetivo es resolver problemas estructurales para la economía y lograr crecimiento sustentable.