La Liga Argentina por los Derechos Humanos denunció que desde el 24 de junio de 2013, la Corte Suprema retiene la sentencia condenatoria de Raúl Harsich y Cesar Fragni, dos de los asesinos del adolescente Floreal Avellaneda, ocurrido en 1976. En ese sentido, la Liga consideró que el comportamiento de los supremos los vuelve "cómplices de la impunidad de genocidas".
"Logramos nueva sentencia contra estos militares en 2012 pero la misma fue apelada y llegó a la Corte donde duerme en un cajón", denunciaron desde el organismo. La madre de Floreal, Iris Pereyra de Avellaneda, es vicepresidenta de la LAPDH y preside la Asociación Sobrevivientes Familiares y Compañerxs de Campo de Mayo y fue reciente galardonada con el premio nacional a los ddhh “Azucena Villaflor”.
Floreal fue secuestrado en abril de 1976 por una patota de la dictadura, sometido a torturas que produjeron su muerte y fue arrojado al Río de la Plata. El cuerpo apareció casi un mes después en la costa uruguaya, junto con otros siete víctimas de los vuelos de la muerte.