En marzo, antes de entrar en la cuarentena, los vecinos a cargo del merendero-comedor Bella Vista, de Villa Floresta, ubicada a la salida de la ciudad de Salta, se vieron envueltos en un problema. El funcionario del Ministerio de Desarrollo Social de Salta, Ignacio González, mencionó al merendero-comedor como uno de los lugares que recibía mercadería de la provincia cuando no era así.
“Nunca habíamos recibido nada e hicimos la denuncia pública”, dijo Guadalupe Villanueva, a cargo del comedor, al hablar con Salta/12. Afirmó que tras la denuncia pública que se decidió iniciar la investigación desde el Ministerio Público Fiscal. Pero hasta el momento se desconocen los resultados de este seguimiento.
Una vez que se inició la acción fiscal, “Desarrollo Social decidió empezar a entregar mercadería y en septiembre fue la primera vez que la recibimos”, dijo Villanueva. Esto duró hasta octubre, dado que ni en noviembre ni este mes se entregó la mercadería “porque dicen que carecemos de número de expediente”.
Desde ese momento la mujer realizó distintas gestiones para conseguir la mercadería sin obtener respuestas. “Mientras, vimos un montón de gente a la que se le daba mercadería”, dijo Villanueva, al referir a lo ocurrido en el galpón de Desarrollo Social, mientras estuvo esperando la mercadería.
Floresta Norte Alta es un barrio popular de habitantes que se asentaron en la zona entre fines de 2015 e inicios de 2016. El 80 por ciento de los vecinos es oriundo de Iruya, Santa Victoria o, Nazareno, localidades ubicadas en la Puna provincial, y algunos de ellos casi en zona de frontera, entre caminos difíciles de sortear.
Villanueva contó que fue inquietud de los vecinos poder contar con un merendero o comedor comunitario, por lo que comenzó con el comedor el 16 de julio de 2018. Cercano a este, más abajo, hay otro a cargo de la agrupación Barrios de Pie. Ante ello acordaron que este abra los lunes, martes y miércoles, mientras que el de Bella Vista, a cargo de Villanueva, lo haga los jueves, viernes y sábados.
Según Villanueva, siempre lograron obtener la mercadería a través de donaciones o trabajos de redes. Pero con la pandemia la posibilidad de reunir mercadería se complicó. Pese a la suspensión de la entrega del alimento por parte de Desarrollo Social se logró hacer funcionar el merendero hasta ahora. Pero al no contar con suficientes productos para cubrir la necesidad alimentaria de la totalidad de las personas que retiran las viandas del comedor, desde el jueves que tienen sus puertas cerradas. Este viernes último se hizo un recital en un local de la Balcarce en el que lograron juntar algo más de mercadería.
Al inicio del merendero “atendíamos solamente niños, teníamos 60 niños. Cuando se inició la pandemia se elevó a 112 personas y empezamos a aceptar abuelos y familias completas porque hay gente que se enfermó de covid-19 y se quedó sin trabajo y no consigue”, dijo. Añadió que mucha gente quedó con secuelas a raíz de haber padecido la enfermedad.
Ante el panorama, indicó que al menos desde el jueves que pasó y hasta ayer la gente se quedó sin posibilidad de acceder a las viandas que entrega el comedor. Además recién el viernes que pasó, después de 8 días, volvieron a tener agua en red. “Si estamos sin agua tampoco podemos hacer nada”, acotó.
Fuentes del Ministerio Público confirmaron que se había iniciado una investigación que quedó en manos de la Unidad de Delitos Económicos Complejos (UDEC). Pero no se obtuvo novedad de ello. Desde el Ministerio de Desarrollo Social, en tanto, no hubo respuesta alguna.