El Leeds United de Marcelo Bielsa logró reponerse de la dura goleada que había sufrido frente al Manchester United (6 a 2) y se impuso por 1 a 0 a Burnley como local este domingo, en una "final" por la permanencia en la Premier League de Inglaterra, en la continuidad de la decimoquinta fecha.
La victoria para el equipo del rosarino llegó gracias a un polémico penal sancionado a los cinco minutos contra el arquero Nick Pope y convertido por el delantero Patrick Bamford, quien había sido protagonista de la acción. Bamford, el goleador del equipo en el ascenso, llegó así a los nueve tantos en el certamen (en 15 partidos) y está a cuatro del líder anotador, el egipcio Mohamed Salah, de Liverpool. En Leeds, lo sigué el polifuncional lateral Stuart Dallas, con tres festejos.
Si bien tuvo varias chances para liquidar la historia, Leeds sufrió hasta el final por culpa de un rival que terminó convirtiendo al arquero francés lllan Meslier -de flojas actuaciones recientemente- en la gran figura del encuentro. Por el lado de la visita, fue también muy cuestionada la anulación de un gol en la primera parte, luego de que el árbitro cobrase una falta en ataque.
"El primer tiempo fue un partido de acuerdo a cómo queríamos jugar y el segundo tiempo no pudimos evitar jugar como quería el rival. Si hubieran empatado el partido, no hubiera sido injusto. Pero valoro mucho el esfuerzo que hicimos para evitar el empate", definió Bielsa luego de finalizado el encuentro en el campo de juego.
Una de las buenas conclusiones que le quedó al equipo del argentino, quien reconoció que hubo una "evolución en la defensa de las pelotas paradas", fue haber sumado su quinta valla invicta del torneo, en el cual es el elenco más goleado, con 30 tantos en contra.
"Era una necesidad para nosotros (mantener el arco en cero), yo lo interpreto como una expresión muy grande de esfuerzo porque en el segundo tiempo que no pudimos imponer nuestro estilo y que fuimos dominados por el rival durante un período largo tuvimos carácter para luchar", agregó el rosarino.
Leeds y Burnley llegaban a la cita con 17 y 13 puntos respectivamente, por lo que la victoria era vital para los dirigidos por Bielsa para alejarse de la zona de descenso. Así, Burnley, que tiene un partido menos, quedó 17º, sólo dos puntos por encima de Fulham, el último en perder la categoría hoy por hoy.
El que no pudo festejar en el cierre de la fecha fue el líder, el Liverpool de Jürgen Klopp, que apenas empató 1 a 1 con West Bromwich, el anteúltimo del torneo, y desaprovechó una buena chance para escaparse de sus perseguidores en su carrera al título.