¿Cómo ubica hoy el psicoanálisis estas tres dimensiones: inconsciente, cuerpo y síntoma, a poco más de un siglo del descubrimiento freudiano? En un recorrido que va de los casos clínicos a los conceptos, intentaremos dar respuesta a esta interrogación, que será el eje de nuestro curso.

El artista que siempre nos lleva la delantera, ubica de entrada las dos  dimensiones que estos conceptos comportan y lo dice de este modo:

"Todo cuerpo es un texto, todo texto es también un cuerpo. Bien leído

muestra la grieta, el punto por donde podría romperse..."(1)

Ese texto, del que Freud se hace agudo lector a partir de su encuentro con las histéricas, inaugura el descubrimiento del inconsciente. Lacan, que sabe leer a Freud, retoma en su enseñanza este inconsciente en una nueva dimensión, que no es la de un saber no sabido sino de borde frente a un imposible de saber. La grieta del poema que es vacío, agujero, misterio, punto de real, unión de la palabra y el cuerpo.

Los padecimientos actuales evidencian esta dimensión que hay que saber leer bien, ya que son del orden del acto, donde la envoltura formal, teorías e interrogaciones del sujeto, brillan por su ausencia. Esta dimensión de goce, donde el desamparo estructural que nos habita se muestra a cielo abierto de manera descarnada, más allá de qué estructura clínica se trate. La vía del psicoanálisis implica poder preservar la dimensión de lo indecible.

Nos interesa investigar el poder de la palabra en su dimensión de creación, de encuentro siempre contingente con el acto del analista, interrogarnos acerca del modo en que se pone en juego la dimensión de la transferencia hoy.

(1) Mercedes Alvarez. El cuerpo Intacto. NY 2016. (2)J.C. Indart, Inédito.

 

* Docente Miembro EOL. Colaborador Tomás Verger, Participante EOL Sección Rosario. En agendapsi.