El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, lamentó que en Argentina se haya aprobado el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y expresó que, mientras dependa de él, en su país el aborto nunca será legalizado.
A través de sus redes sociales, el mandatario afirmó que “la vida de los niños argentinos ahora está sujeta a ser terminada en el vientre de sus madres con el consentimiento del Estado”. Y agregó: "En la medida en que dependa de mí y de mi gobierno, el aborto nunca será aprobado en nuestro suelo. ¡Siempre lucharemos para proteger la vida de los inocentes!"
Las expresiones de Bolsonaro siguieron la misma línea que la del canciller Ernesto Araújo, quien más temprano señaló que "Brasil permanecerá en la vanguardia del derecho a la vida y en la defensa de los indefensos, no importa cuántos países legalicen la barbarie del aborto indiscriminado, disfrazado de salud reproductiva o derechos sociales o como quieran decirle".
En el último tiempo, Araujo participó en foros internacionales como vocero de la idea que pretende imponer la supuesta existencia en el mundo de una "cristofobia" o persecución a los cristianos evangelistas.
Cabe destacar que el gobierno de Jair Bolsonaro tiene entre su base electoral y parlamentaria a los sectores más conservadores de las iglesias evangelistas, entre ellas una alianza oficializada con la Iglesia Universal del Reino de Dios, del magnate Edir Macedo, dueño del canal Record.
Por su parte, la pastora Damares Alves, ministra de Derechos Humanos y de la Mujer, publicó ayer en su cuenta de Instagram un texto que decía "Orando por Argentina". La funcionaria se destacó en esta 2020 por movilizar a parte de su base política para evitar un aborto de una niña de 10 años en el estado de Alagoas que había sido violada por su padrastro.
Brasil es el principal socio comercial de la Argentina y en los últimos meses las relaciones se descongelaron con una videollamada entre los presidentes Bolsonaro y Alberto Fernández, el 30 de noviembre, día de la amistad binacional.
En 2019, luego del triunfo electoral de Alberto Fernández, el canciller que se había manifestado abiertamente a favor de Mauricio Macri sostuvo que con el resultado “las fuerzas del mal están festejando".