Luego de que el Senado de la Nación convirtiera en ley el proyecto de Interrupción Volunataria del Embarazo (IVE), el intendente de Juntos por el Cambio en la localidad tucumana de Yerba Buena, Mariano Campero, dispuso que las banderas nacionales permanezcan a media asta en rechazo a la aprobación del aborto legal.
El municipio gobernado por Campero decretó la medida por cuatro días. "Es en señal de duelo por los bebés que no van a nacer", remarcó Javier Jantus, secretario de Relaciones Institucionales del municipio.
A través de su cuenta de Twitter, Jantus indicó que "las reacciones en contra de esta trasnochada y aberrante ley van surgiendo en todo el país" y señaló que "el gobierno de Alberto Fernández y los diputados y senadores que apoyaron la ley van a contramano de la sociedad".
"Toda vida vale. Con Mariano Campero y el gabinete municipal se lo decimos al mundo", concluyó.
La ley de aborto legal, seguro y gratuito fue aprobada el martes con una abrumadora diferencia de 38 fotos a favor, 29 en contra y una abstención. La noticia fue mal recibida por algunos sectores, y fueron distintas las expresiones y amenazas judiciales que surgieron contra su futura puesta en práctica.
Hace dos años, cuando el proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados, la provincia gobernada por Juan Manzur fue declarada como "provida" mediante una resolución de la legislatura provincial.
"Declárase a la provincia de Tucumán como ‘provincia provida’ considerando como política de Estado la defensa de la vida desde el momento de la concepción en el vientre materno hasta su muerte natural", reza el texto de la iniciativa aprobada en 2018.