“Por el momento no hay ningún elemento ni indicio” que indique que los dos motociclistas atropellados en forma intencional por el marido de Carolina Píparo hayan sido los mismos que le habrían robado el celular, tal como denunció la diputada bonaerense. Así lo señalaron fuentes judiciales, mientras que el abogado que representa a los dos jóvenes le ratificó a Página/12 que solicitará que la causa sea caratulada como “intento de doble homicidio con dolo eventual”.
Consultado por este diario, el abogado Martín de Vargas aseguró que “lo del robo es una hipótesis, porque no hay ninguna evidencia que corrobore que haya existido”. Comentó que Píparo “dijo que el robo ocurrió cerca de las 2.30” del 1º de enero, mientras que a los chicos los atropellaron cerca de las 3.30” del primer día del año. “Hay una distancia horaria considerable y por lo general, en un robo de ese tipo, los autores escapan y se alejan del lugar del hecho”. Agregó que por el momento “hay registro de las cámaras de seguridad sobre cómo los atropellaron, pero no hay registros del supuesto robo”. Insistió Vargas en que “si es verdad lo del robo, cosa que dudo, está claro que los dos chicos no tienen nada que ver con ningún delito”.
“Ella (Píparo) le dijo al diario El Día (de La Plata) que se encontraron con los chicos cuando se dirigían hacia la comisaría para denunciar el robo, pero lo curioso es que cuando los atropellaron estaban circulando en sentido contrario al lugar donde está la comisaría 1ª, de manera que allí hay una contradicción que debe aclararse”. Precisó que “la comisaría está cerca de Plaza Moreno y ellos (Píparo y su marido) se estaban alejando de la Plaza Moreno”.
De Vargas sostuvo que “lo único cierto es que a los chicos, Iván y Luis, los atropellaron a propósito y los dejaron con la cabeza reventada, tirados en el asfalto”. Dijo que en los videos se advierte que Juan Ignacio Bazali, el marido de Píparo, “ni siquiera intentó frenar, los embistió y siguió. Y en ese trayecto de cuatro cuadras de La Plata, estamos hablando de unos 500 metros, y en ese trayecto atropelló por lo menos a cuatro autos”.
La moto había quedado trabada debajo del Fiat 500L en el que iba el matrimonio. “Los dos chicos, por suerte dentro de lo terrible del caso, salieron despedidos de la moto y uno de ellos cayó al asfalto luego de pasar por encima del auto”. Los dos sufrieron golpes, heridas y traumatismos en la cabeza y en distintos lugares del cuerpo. “Están vivos de milagro”, recalcó Vargas. “Fue un escape al estilo de Rápidos y Furiosos”.
El abogado subrayó que “aunque la hipótesis del robo sea cierta, y ellos los vieron a los chicos y los atropellaron porque se equivocaron y creyeron que eran los supuestos ladrones, de todos modos, cabe el delito de doble tentativa de homicidio, porque usaron el auto como un arma para matar, porque ellos saben plenamente que el auto es un medio idóneo para matar”. Estimó que la responsabilidad es conjunta, no sólo del conductor del auto. Agregó que “también hay que analizar si Píparo dijo la verdad cuando habló del robo, porque sería un agravante por falsa denuncia, por falso testimonio porque ella está obligada a decir la verdad y como legisladora lo sabe muy bien”.
Por otra parte, fuentes judiciales confirmaron que los jóvenes atropellados prestaron declaración testimonial ante la fiscal de la causa, Eugenia Di Lorenzo. Los voceros dijeron que “por el momento no existe ningún elemento ni indicio que indique que ellos tuvieron que ver con el robo que se denunció”,
Trascendió que el Iphone cuyo robo fue denunciado por Píparo ya fue recuperado, porque fue encontrado, tirado en la calle, por una pareja de jóvenes. Al parecer, el hallazgo fue en un lugar que no tiene ninguna relación con las calles por las que circulaban los dos jóvenes que fueron atropellados. En la causa, por el momento, no hay una imputación directa contra Juan Ignacio Buzali, el esposo de Píparo. La defensa del conductor del auto fue asumida por el abogado Fernando Burlando.
A Buzali sólo se le notificó sobre la apertura de una causa por “lesiones culposas”. El conductor del Fiat 500L será citado, una vez que termine la ronda de testigos del hecho. Los damnificados son Luis Lavalle, de 23 años, e Iván, un adolescente de 17. Los dos viven en la zona rutal de La Plata y estaban en la ciudad presenciando la tradicional quema de muñecos que se realizar siempre en Año Nuevo.
Fuentes de la causa admitieron que se va a investigar por qué motivo no se le hizo el control de alcoholemia al marido de Píparo, luego de su furioso raid por las calles platenses. Esto se debe a que varios testigos presenciales aseguraron que el conductor tenía “actitudes de una persona que está bajo los efectos del alcohol”.
La primera denuncia
“Un auto atropelló a una moto y se dio a la fuga”. Esa fue la descripción que brindó una vecina de la La Plata en el llamado al 911 para pedir asistencia a los jóvenes atropellados por el marido de la diputada provincial Carolina Píparo.
En el audio de la comunicación teléfonica que se conoció este sábado, una testigo del hecho le solicitó al organismo encargado de atender emergencias una “ambulancia urgente a 21 entre 39 y 40" para auxiliar a los heridos. Al comenzar la conversación la mujer explicó: "Un vehículo chocó a una moto y siguió. Lo están siguiendo otras motos”.
"Entonces un auto atropelló a una moto. ¿Hay heridos?", consultó la trabajadora del 911. "Sí, hay heridos. Hay un chico tirado", respondió la mujer que presenció el siniestro.
Frente a la pregunta de la central de emergencias, la vecina señaló que el vehículo “se dio a la fuga”. Agregó que los vecinos, en varios vehículos y motos, comenzaron a seguir al conductor del auto, indignados por lo ocurrido. Píparo dijo al hacer la denuncia, que huyeron porque los perseguían grupos de “motochorros”.