Una gran polémica se instaló esta semana en Dinamarca tras el estreno de "John Dillermand", un programa animado que cuenta la historia de un hombre, vestido con un traje de baño a rayas rojas y blancas, que tiene una curiosa particularidad: es poseedor del "pene más largo del mundo".

El programa comenzó el 2 de enero en la cadena infantil DR Ramasjang y el primero de sus trece episodios ya tuvo más de 140.000 visitas. Según sus creadores, se trata de una tira dirigida a niñes de entre cuatro y ocho años.

Su protagonista, a solo días del estreno, ya está en boca de todo el mundo. Se trata de John, un hombre bigotudo cuyo pene, exageradamente largo, está representado como una soga que sale de su traje de baño para realizar actividades cotidianas, entre ellas pasear a su perro, montar en bicicleta o visitar el zoológico.

En sus enredadas aventuras, John llega incluso a sobrevolar la ciudad con su pene enganchado a globos. "Es un programa muy danés", aseguró a la agencia AFP Sofie Münster, especialista en educación. "Tenemos la tradición de correr los límites de manera humorística y hacerlo de manera normal", explicó.

Morten Skov Hansen, el director de DR Ramasjang, emitió un comunicado advirtiendo que el programa continuará transmitiéndose según lo planeado. Además, señaló que Sex & Samfund, una asociación danesa de educación sexual, formó parte del desarrollo del programa y que DR está satisfecho con el resultado final.

En su cuenta de Facebook, la cadena explicó: "Consideramos que es una tarea importante contar historias sobre el cuerpo. Con la serie, reconocemos la naciente curiosidad (de los niños) por el cuerpo y los órganos genitales, así como la vergüenza y el placer del cuerpo".

Críticas

Sin embargo, no toda la población danesa lo recibió de la misma manera. "Es el programa más repugnante y menos apropiado para los niños de una cadena especializada en mucho tiempo", opinó una internauta.

En la misma dirección, el diputado de extrema derecha Morten Messerchmidt manifestó que no le parecía adecuado que "los órganos genitales de los hombres adultos se deban transformar en algo común para los niños. ¿Es esto un servicio público?", se preguntó. 

"Este debate parte de la perspectiva de los adultos, en la que el largo pene es sexualizado, los niños por su parte tienen una perspectiva totalmente diferente", advirtió el legislador.