Una de las postales más crudas de la inédita jornada en la que seguidores del presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, tomaron el Congreso fue la de un manifestante cómodamente sentado en el despacho de la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Logrando burlar a la seguridad para ingresar al lugar, dejó además un mensaje intimidatorio: "No retrocederemos". En el medio del caos en Washington, una mujer murió luego de recibir varios impactos de bala, indicaron fuentes policiales al canal MSNBC. Además un joven estaría gravemente herido.

El hombre de mediana edad que consiguió irrumpir en la oficina de la dirigente demócrata vestía jeans, campera, borceguíes y una gorra oscura. Posó para la foto con uno de sus pies sobre el escritorio del despacho, mientras la bandera de los Estados Unidos que presumiblemente portó durante la manifestación descansa sobre una mesa cercana.

Pelosi, al igual que la totalidad de los miembros del Congreso, fue evacuada por la seguridad del edificio cuando los manifestantes pro-Trump irrumpieron en el edificio y se enfrentaron con la policía. Sobre su escritorio, el manifestante y quienes hayan ingresado con él al despacho de la líder demócrata dejaron el mensaje "No retrocederemos".

La veterana senadora, tercera en la línea de sucesión después de Joe Biden y su vice Kamala Harris, emitió un comunicado en el que pidió a Trump que "demande que todos los manifestantes abandonen el Capitolio y sus alrededores de inmediato". Pelosi volvió a ser designada presidenta de la Cámara de Representantes días atrás. 

Seguidores de Trump enardecidos irrumpieron el miércoles en el Congreso de Estados Unidos cuando se certificaba la victoria de Biden, provocando un caos inédito poco después de que el vicepresidente Mike Pence anunciara que no tenía autoridad constitucional para oponerse a reconocer el triunfo de Biden. "Nos estamos apoderando de la Cámara", dijo a la agencia AFP un manifestante que agregó: "Este es nuestro Congreso".

Ondeando sus banderas azules y los gorros rojos de la campaña, los seguidores del mandatario saliente irrumpieron en el edificio y avanzaron directo a la cámara de debates. Una foto que se viralizó en Twitter mostró a guardias de seguridad vestidos de civil y apuntando con pistolas a través de la ventana rota de una puerta para evitar que entrara más gente. "No veo nada como esto desde que estuve desplegado en Irak", dijo Mike Gallagher, legislador republicano y veterano de guerra, a la cadena CNN. 

Congresistas dijeron que recibieron instrucciones de ponerse máscaras antigas y tumbarse en el suelo, mientras la policía del Capitolio desenfundaba sus armas para protegerlos. Medios locales reportaron una persona herida de bala por las fuerzas de seguridad que terminó falleciendo horas más tarde. La mujer había sido trasladada de emergencia con una fuerte hemorragia desde el interior de la sede legislativa. Además, un hombre de 24 años se encuentra herido de gravedad después de arrojarse al vacío en las cercanías del Capitolio, según fuentes citadas por la CNN. 

El jefe de la Policía de Washington, Robert Contee, se presentó ante los medios y aseguró que trece personas fueron detenidas durante la caótica jornada, todos ellos procedentes "de fuera de Washington". La Guardia Nacional se movilizó para tratar de contener las protestas. En tanto, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, ordenó un toque de queda en toda la ciudad desde las 18 horas del miércoles hasta las seis del jueves.