El gobernador del distrito afgano de Achin, Esmail Shinwari, habló con la agencia de noticias AFP y confirmó que la llamada “madre de todas las bombas” cayó en una zona llamada Momand Dara. "Esa explosión fue la mayor que he visto en toda mi vida. Enormes columnas de fuego se tragaron toda el área", dijo.
El funcionario añadió que por el momento no había informaciones completas sobre las víctimas pero sostuvo que “si se considera que era un área del EI, pensamos que debe haber muchos combatientes del EI muertos".
En tanto, el general John Nicholson, jefe de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, dijo que la gigantesca bomba es "la munición adecuada para reducir los obstáculos y mantener el impulso de nuestra ofensiva" contra las fuerzas del Estado Islámico y Jorasán. Por su parte, el coronel Pat Ryder, portavoz de la Fuerza Aérea, confirmó que “es la más potente bomba no nuclear jamás usada en combate".
El Estado Islámico llegó a Afganistán en 2015 y se estima que tiene unos 3000 combatientes en ese país. Durante mucho tiempo solo tuvo presencia en las provincias de Nangarhar y Kunar, en el este. Desde hace meses, las fuerzas afganas y las estadounidenses lanzan ataques aéreos contra posiciones de la milicia yihadista en la región.
De todas formas, en 2016 el EI provocó más víctimas que nunca, según un informe de la ONU. Esto se debe a que cambió su estrategia y en lugar de intentar hacerse de territorio, perpetró más atentados terroristas.Desde comienzos del año se adjudicó tres grandes atentados en Kabul, la capital. El miércoles, un atacante suicida se inmoló en medio de un grupo de empleados de un ministerio que acababan de salir de su trabajo y mató a cinco personas.
Los expertos temen que los combatientes del EI busquen una nueva base en Afganistán y Asia Central en su huida de Irak y Siria.