En Joaquín V. González se hizo la audiencia pública por el cambio de uso de suelo que pedido por la firma Baba SRL en Finca Los Colorados para la explotación ganadera silvo pastoril. El proyecto desmontará 662 hectáreas de bosque nativo y estima que empleará solo a 5 o 6 personas. Aunque no se habían presentado oposiciones en el plazo establecido, en el desarrollo de la audiencia ciudadanos de la zona cuestionaron los costos ambientales para la población y los nulos beneficios por la irrisoria mano de obra que se va a emplear. En cambio, propusieron que se implementen proyectos agroecológicos y sustentables.
La firma Baba SA es de los socios Luis y Sergio Barzola. El ingeniero agrónomo Cristian Federico Garcus expuso en la audiencia el Estudio de Impacto Ambiental y Social que realizó para la empresa. Aseguró que el territorio a desmontar está categorizado como área verde, sostuvo que “ambientalmente la zona es apta para hacer ganadería” y que dijo van a reemplazar el bosque nativo por pasturas en las 662 hectáreas que pretenden desmontar.
“(Con la pastura) el suelo siempre va a tener cobertura, lo que va a evitar el sobrecalentamiento, el disecamiento, los procesos erosivos”, sostuvo Garcus. Asumió ante una de las consultas que las pasturas absorben menos agua que el monte nativo en caso de inundaciones.
“Tenemos pensado hacer sistematización de los lotes. Es un proyecto en el cual hacemos el manejo de los excedentes hídricos para que éstos no dañen el suelo y tampoco a los vecinos (…). Generalmente los excedentes producidos en esta zona son por lluvias estacionales de elevada intensidad y con baja frecuencia, hay mucha agua de golpe y durante un período largo no llueve. Hacemos el manejo de ese excedente para que se infiltre en el suelo y no escurra, el problema es cuando no escurre, estamos buscando que eso se infiltre y pueda ser utilizado por la vegetación nuevamente", explicó el ingeniero. Ante la pregunta de una vecina sobre cuál es la profundidad de las napas freáticas, Garcus no supo responder.
En la zona, sus pobladores padecen además las altas temperaturas y los fuertes vientos que arrastran tierra que atribuyen a las deforestaciones. Garcus dijo que el área en que van a trabajar es “muy chica para tener un impacto ambiental” y aseguró que en todo caso será ínfimo, “no va a cambiar el microclima en el área del proyecto y menos en Joaquín V. González”, afirmó.
El proyecto se compromete a dejar 291 hectáreas de cortinas para protección y reserva de la flora y fauna. Las especies de árboles que hay en la zona son quebracho blanco y colorado, algarrobo blanco y negro, palo cruz y palo borracho, molle negro, guayacán y, en menor medida, palo santo. También se encuentran las especies herbáceas ancoche, bola verde, sacha sandía, sacha pera, sacha poroto, atamisqui, tuna, cardón y chaguar.
Respecto a la fauna, Garcus señaló que hay una importante diversidad biológica de mamíferos y también de aves, aunque no detalló cuáles. Aseguró que no hay especies protegidas.
El proyecto estima que tendrá una vaca por hectárea “en condiciones óptimas”. Las van a alimentar con pastura megatérmica y con sorgo para el invierno. Garcus sostuvo que usarán “mosquito” para aplicar agroquímicos y que la aplicación de insecticidas será de forma terrestre. No especificó qué productos usarán pero aseguró que serán de baja residualidad.
El vecino y ambientalista Eric Zamora planteó la oposición al proyecto. "Me parece desproporcional desmontar más de 600 hectáreas para ocupar 5 empleados. Considero que nos debemos oponer tajantemente a este proyecto ya que en los últimos 15 años se han desmontado en el departamento aproximadamente 1.200.000 hectáreas y no podemos seguir sosteniendo este modelo agroindustrial que lo único que hace es beneficiarse económicamente y dejarnos enfermedades, altas tasas de mortalidad debido a estas prácticas", aseguró.
Zamora enfatizó que Anta es "el segundo departamento más pobre de la provincia pese a que tiene el 60 y 65% de la producción agroganadera y 70% de soja del noroeste argentino".
El vecino consideró que el proyecto de Finca Los Colorados no mejorará las condiciones laborales de las personas que viven en el departamento. "Lo que plantea este proyecto es beneficiar económicamente a un puñado de empresarios y dejarnos perjuicio para nosotros", afirmó.
A la audiencia concurrieron militantes del Movimiento Territorial de Liberación Rebelde, quienes no hablaron en la audiencia pero manifestaron a Salta/12 su oposición a que se siga deforestando el departamento.
Desde el Programa de Audiencias Públicas enviaron invitaciones personales a la diputada Alejandra Navarro, a los diputados Marcelo Paz y Pedro Sandez, al senador Marcelo García, al cuerpo de concejales de Joaquín V. González, al intendente Juan Domingo Aguirre, también a funcionarios provinciales, pero no asistieron.
La jefa del programa de Audiencias Públicas, Antonella Pereyra, destacó que la audiencia se desarrolló de forma pacífica, y recordó que no es vinculante pero "ayuda a la toma de decisiones". Especificó que la difusión de esta audiencia se garantizó mediante la publicación de edictos en el Boletín Oficial y en el diario de mayor circulación de la provincia. Algunos vecinos y vecinas presentaron quejas respecto a que no se habían enterado y también cuestionaron que el Estudio de Impacto Ambiental y Social no estuviera disponible digitalizado.
Pereyra detalló que tiene 10 días de plazo para enviar un informe de la audiencia a la Secretaría de Medio Ambiente para que emita o no el certificado de aptitud ambiental.