Los 511 contagios de covid-19 confirmados este martes en Rosario muestran una aceleración que vuelve a generar preocupación en quienes trabajan en la salud pública, exhaustos tras haber lidiado con la pandemia desde marzo. "La situación es más grave que al principio por dos motivos, porque la velocidad del crecimiento de los casos es más rápido, ya que ha habido una pérdida de respeto a la pandemia. La mayoría de la gente joven o los adultos jóvenes están teniendo una vida social más activa y con más contacto social, eso produce una mayor circulación del virus. Y por otro lado, el cansancio y el agotamiento del aislamiento. Entonces, se produjo en diciembre y lo que llevamos de enero una gran cantidad de movilidad social que hizo que el virus circulara mucho, y hubiera un ascenso muy rápido de los casos con el riesgo de saturación del sistema", tal el crudo diagnóstico de Ricardo Cordone, médico generalista, docente universitario e integrante de la Asamblea de Trabajadores por la Salud Colectiva, un movimiento que se inició en Rosario cuando el pico de casos se combinó con la apertura de actividades. Ante la embestida contra la Sputnik V, el colectivo también apuesta con fuerza a promover su aplicación (en los tiempos del calendario) y combatir "las operaciones" contra la inmunización. "Queremos hacer una campaña muy fuerte para incentivar a la población a que se vacune", afirmó Cordone, quien aseguró que las críticas que circulan "no tienen nada de científico". 

Aunque no se han reunido para evaluar esta situación, las conversaciones llevan a quienes integran la Asamblea a tener una mirada común. "Para nosotros las medidas restrictivas deberían haber sido más estrictas. Si bien se podrían haber mantenido algunas actividades económicas, principalmente productivas, sí tendríamos que haber sido mucho más estrictos con el tema de circulación fuera de lo estrictamente productivo, en lo recreativo y reuniones sociales", aportó el profesional. 

El diagnóstico de mayor gravedad tiene varias aristas. "Hay una gran cantidad de población, entre el 20 y el 25 por ciento, que estaba aislada, principalmente niños y adolescentes, quienes no iban a la escuela, que empezaron a tomar contactos y son la población que menos se cuida, la que menos capacidad tiene de usar los métodos de aislamiento y elementos de protección personal como el barbijo. Entonces hay una gran cantidad de personas susceptibles de infectarse, eso va a hacer y viene haciendo que el crecimiento sea tan rápido", analizó Cordone.

También el sistema de salud está en peores condiciones para responder, aunque tenga mayor equipamiento e infraestructura. "A diferencia de marzo, abril, mayo cuando empezó la pandemia, e incluso de julio-agosto y septiembre, cuando tuvimos el pico, el sistema de salud está mucho más agotado. Estamos todos mucho más cansados que al comienzo, hay una importante cantidad de personal que está licenciado, y ya se están solicitando vacaciones, porque necesitamos descansar. Eso hace que baje la cantidad de gente que está trabajando. Esas dos cuestiones, el aceleramiento de los casos y el agotamiento del personal pone una situación más crítica que al comienzo de la pandemia", planteó.

Sobre la necesidad de evitar nuevos contagios, Cordone consideró "una lástima" la aceleración de estos días. "Estamos a un mes, a dos meses, de que se produzca una masiva vacunación tanto al personal de riesgo como a los trabajadores de riesgo y a los ciudadanos comunes mayores de 60 años. En estos dos meses sería muy interesante que podamos aplastar la curva como decimos nosotros y no aplanarla, porque mientras sigamos sin tener un tratamiento efectivo, cuantos más casos tenemos, más internados tenemos y más muertos tenemos. La manera de bajar la mortalidad es bajar los casos", apuntó el médico y consideró que "lamentablemente, el objetivo sanitario tanto a nivel nacional, provincial y local es que la gente no se muera en la calle, que no se muera sin una cama. La ministra (de Salud) de la provincia, (Sonia Martorano) lo repite todo el tiempo, como un logro, que ningún paciente se quedó sin atención", sumó Cordone, quien subrayó que "es muy bueno que eso haya pasado", pero recordó que "hay un porcentaje alto de pacientes mayores de 60 años que se mueren. Entonces, para esos pacientes es mejor no contagiarse y para no contagiarse tenemos que disminuir la circulación del virus". 

El planteo es de mayores restricciones durante un mes, o al menos, una restricción intermitente, que sea estricta por una semana y con apertura por otra semana. "Esto nos va a dar el tiempo para vacunar más masivamente", consideró. Al mismo tiempo, están planteando "una campaña muy fuerte para incentivar a la población a que se vacune. Queremos salir muy claro en contra de todos los cuestionamientos a la vacuna, los desprestigio a la cosa rusa y todas esas pavada, que nosotros sabemos que no tienen nada de científico, y que en realidad son operaciones políticas", apuntó el profesional de la salud.