La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que el 95% de las vacunas contra el coronavirus está concentrado en diez países, por lo que el director para le región Europa de la organización, Hans Kluge, hizo un llamando a ser más solidarios: "Todos los países capaces de contribuir, dar y apoyar el acceso y el despliegue justos de las vacunas háganlo".
El director de emergencias de la OMS, Michael Ryan, consideró un logro que en poco más de un mes unas 28 millones de dosis fueron aplicadas, pero lamentó que eso ocurrió en 46 países, mientras que diez concentraron el 95% de las aplicaciones.
De acuerdo a la plataforma de análisis de datos Our World in Data, que se basa en cifras de la Universidad Oxford, esos diez países son: Estados Unidos, China, Reino Unido, Israel, Emiratos Árabes Unidos, Italia, Rusia, Alemania, España y Canadá.
En conferencia de prensa, Kluge subrayó que se están realizando "enormes" esfuerzos de la organización y sus socios para que cada país pueda obtener los fármacos. La OMS anunció la semana pasada que comenzaría a fines de enero a repartir las primeras dósis a través de la alianza Covax, sistema alternativo para asistir a 172 países de manera equitativa sin importar su capacidad económica.
El sistema surgió tras el frustrado reclamo ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), liderado por Sudáfrica e India, con el respaldo de otros 99 países, para que se libera el derecho comercial de patente de las vacunas, medida resistida por los potencias económicas que tienen el poder de producir la vacuna.
Un 2021 con Covid-19, pero "más previsible"
Kluge intentó mantenerse optimista al decir que este 2021 “será otro año de coronavirus, pero más previsible" y "más fácil de controlar", también mostró preocupación ante las nuevas variantes detectadas especialmente en Reino Unido y Sudáfrica, cuya propagación es entre 40 y 70% más rápida.
"La situación es alarmante", confirmó Kluge. Estas nuevas variantes ya se expandieron a 50 países y 20 territorios, respectivamente. De hecho, en la región Europa, 25 países, entre ellos Rusia, ya confirmaron la detección de casos relacionados con la nueva variante VOC 202012/01.
"Con una transmisibilidad mayor y una gravedad de la enfermedad similar, la variante suscita preocupación: sin un mayor control para frenar la propagación, habrá un mayor impacto en los centros de salud, casi desbordados y bajo presión", explicó el director regional.