El oficialismo intentará poner en marcha la Cámara de Diputados antes de que finalice enero para someter a debate el temario enviado por el Poder Ejecutivo para ser tratado en el periodo de sesiones extraordinarias. Más allá de que la intención del bloque del Frente de Todos es sólo tratar temas que tengan que ver con la agenda económica del Gobierno, Juntos por el Cambio dilata la firma de la prórroga del protocolo de sesiones remotas con mayoría presencial con el fin de dejar en claro su rechazo al tratamiento de cualquier tema que tenga que ver con aplicar reformas en el Poder Judicial. “Estamos acostumbrados, cada vez que hay que renovar el protocolo de sesiones te buscan correr el arco”, señaló ante Página/12 un vocero del oficialismo.
En ese marco, el macrismo, a diferencia del resto de los bloques de la Cámara baja aun no adhirió a la prórroga del protocolo virtual, a la espera de que se establezcan de antemano los temas a tratar. Desde el oficialismo entienden que el temario no puede ser condicionante para poder sesionar. Sin embargo, le adelantaron al bloque opositor que no habrá ningún tema conflictivo. Pero, por ahora, el anticipo del oficialismo respecto de sus intenciones legislativas no fue suficiente para que Juntos por el Cambio acepte seguir con las sesiones virtuales con mayoría presencial.
El titular de la Cámara baja, Sergio Massa, había anunciado que la primera sesión del año se llevaría a cabo el 20 de enero, pero la posición adoptada por el principal bloque opositor hizo que modificara sus previsiones. Así las cosas, en el mejor de los casos, el oficialismo espera poder poner en funcionamiento el recinto el 26 de enero.
Desde el entorno de Sergio Massa, le aseguraron a Página/12 que la semana que viene será clave para avanzar en un acuerdo con la oposición y poder convocar a una sesión para la última semana de enero. Por ahora, desde Juntos por el Cambio mantienen firme su postura y esperan por las negociaciones que se retomarán a partir del lunes.
El interbloque presidido por Mario Negri volver a exigir que se le anexen al nuevo protocolo los temas que se van a tratar. En el Frente de Todos evalúan la exigencia como desmedida. “Desde cuándo la oposición decide qué se trata y qué no se trata. Cuando el macrismo era oficialismo a nadie se le ocurría tamaña barbaridad”, se quejó uno de los asesores más importantes que tiene el Frente de Todos en la Cámara baja. Ante ese escenario desde el bloque oficialista reiteraron que los primeros debates del año girarán en torno a temas consensuados, que además son prioritarios para el Gobierno, como el nuevo proyecto de sostenibilidad de la deuda pública externa y beneficios impositivos para la construcción.
En el Ejecutivo también buscan acelerar la discusión sobre los proyectos de monotributo y de prórroga del Régimen de Promoción de los Biocombustibles, aunque para poder votarlos en extraordinarias deberá dictar una ampliación del temario en un nuevo decreto, ya que no habían sido incorporados en el original.
Más allá de las de las idas y vueltas con el macrismo, desde la presidencia de la Cámara Diputados buscará que el protocolo virtual sea extendido en los mismos términos que en la actualidad, es decir, con mayor cantidad de diputados presentes en el recinto y unas pocas excepciones por cuestiones sanitarias para aquellos legisladores que integren grupos de riesgo, quienes podrán participar desde sus provincias.
La intención del bloque que comanda Máximo Kirchner es poder comenzar a trabajar en Comisión la semana próxima y dejar a los proyectos en condiciones de ser tratado por el pleno de la Cámara. Al mismo tiempo, buscará llevar a buen puerto la negociación con JxC para que la primera sesión del año se realice sin cuestionamiento.