El Instituto de Salud Pública de Noruega advirtió que las vacunas contra el coronavirus pueden ser riesgosas para los mayores de 80 años y pacientes con enfermedades terminales. La advertencia tuvo lugar tras confirmarse que 23 personas fallecieron luego de aplicarse la vacuna de Pfizer –BioNtech. Todos los decesos se produjeron en hogares para ancianos y todos eran mayores de 80 años.
"Fiebre y náuseas podrían haber provocado la muerte de algunos pacientes débiles. Para aquellos con la fragilidad más severa, incluso los efectos secundarios relativamente leves de la vacuna pueden tener graves consecuencias'', dijo Sigurd Hortemo, médico jefe de la Agencia Noruega de Medicamentos.
Por su parte, el director médico de ese mismo organismo, Steinar Madsen, aseguró: "No estamos alarmados por esto. Está bastante claro que estas vacunas tienen muy poco riesgo, con una pequeña excepción en el caso de los pacientes más débiles”.
De acuerdo al informe presentado por la agencia de Noruega, “los grandes estudios de la vacunan de Pfizer- BioNTec no incluyeron a pacientes con enfermedades inestables o agudas e incluyeron pocos pacientes mayores a 85 años”. Y aclararon: “En Noruega ahora estamos vacunando a personas mayores y a ancianos con enfermedades subyacentes graves, por lo que se espera que ocurran muertes cercanas al momento de la vacunación”.
Más de 30.000 personas recibieron la primera dosis de la vacunas de Pfizer o Moderna en el país escandinavo, que inició el operativo de vacunación en diciembre. Hasta ahora, 29 personas sufrieron efectos secundarios, 23 de ellos fatales. De esas muertes, se evaluaron 13 y se llegó a la conclusión de que los efectos secundarios asociados con la vacuna pueden haber contribuido a reacciones graves entre los pacientes débiles y los ancianos.
Desde Pfizer y BioNTech aseguraron que ya están trabajando con el regulador noruego para investigar las muertes. “La agencia encontró que la cantidad de incidentes hasta ahora no es alarmante y está en línea con las expectativas", dijo Pfizer en un comunicado.
Otros efectos adversos
La semana pasada, en Estados Unidos las autoridades informaron 21 casos de reacciones alérgicas graves después de la administración de aproximadamente 1,9 millones de dosis iniciales de la vacuna desarrollada por Pfizer-BioNTech SE. Esa es una incidencia de 11,1 casos por millón de dosis, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
En tanto, en Israel, unas 13 personas tuvieron una parálisis facial leve como efecto secundario después de recibir la primera dosis de la vacuna contra la Covid-19, informó el Ministerio de Salud israelí, y estimó que el número de casos podría ser mayor.