La defensa del ex vicepresidente Amado Boudou apeló este lunes la decisión con la que el Tribunal Oral Federal Número 4 de Capital Federal le puso fin al beneficio de prisión domiciliaria del que gozaba desde abril del año pasado en el marco del cumplimiento de una condena a 5 años y 10 meses de encierro en la causa Ciccone.
Los abogados Alejandro Rúa y Graciana Peñafort, representantes de la defensa de Boudou, presentaron un recurso para que el juez Daniel Obligado, presidente del TOF 4, para que habilite la intervención de la Cámara Federal de Casación para que defina las condiciones en las que el ex vicepresidente debe cumplir condena, informaron fuentes judiciales a la agencia Telam.
El recurso, que Obligado debe analizar si concede o no, tiene "efecto suspensivo", es decir, que lo resuelto por Obligado no se aplique hasta que quede firme, y busca que Boudou continúe cumpliendo condena en su domicilio, una casona en Avellaneda, bajo supervisión electrónica.
Obligado, juez a cargo de la ejecución de la condena que Boudou recibió en el marco de la causa Ciccone, había revocado el 31 de diciembre pasado la prisión domiciliaria con la que el ex vicepresidente había sido beneficiado en abril de 2020. A principios de ese mes, la Corte Suprema dejó firme la condena a 5 años y 10 meses que el ex titular de la Anses había recibido por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública. Los supremos ni se gastaron en analizar los hechos.
En el documento de apelación, les defensores del ex funcionario calificaron la decisión de Obligado como "errada" y "arbitraria". Consideraron que el magistrado emitió un fallo que no fue "correctamente fundado".
Les abogades enmarcaron su recurso en los Derechos del Niño de los que gozan los hijos mellizos de Boudou, que tienen dos años, y en sus necesidades de cuidado, fundamentos sobre los cuales fundaron el pedido de arresto domiciliario en abril de 2020 y sobre los cuales tal beneficio fue otorgado.
Rúa y Peñafort remarcaron que "es imposible" que Boudou reciba en la cárcel de Ezeiza, donde estuvo detenido hasta que se le concedió el arresto domiciliario, la visita de sus hijos "mientras se mantenga la emergencia sanitaria declarada a nivel nacional y mundial y la pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud" ante el coronavirus.
Además, interpretaron que "aún si esa limitación se superase, resulta una afirmación dogmática y alejada de las constancias del trámite la pretensión ensayada en la resolución recurrida acerca de que con ellas podría mantenerse el fortalecimiento del vínculo paterno-filial como en el arresto domiciliario".