Las jubilaciones más bajas le ganaron a la inflación durante el 2020. Los aumentos para la mínima fueron del 35,3 por ciento, contra una inflación del 36,1 por ciento. Sin embargo, como además se otorgaron tres bonos, más de la mitad de los haberes tuvo una mejora en su poder adquisitivo, según un análisis de Carlos Martínez, economista de la Universidad de General Sarmiento (UNGS).
En el primer año de presidencia de Alberto Fernández, la movilidad fue suspendida por una ley votada por el Congreso y los aumentos se definieron por decreto. El primero, en marzo del año pasado, se otorgó con un componente de suma fija, por lo que en la práctica fue mayor para las jubilaciones más bajas, y menor para las más altas. Los aumentos de junio, septiembre y diciembre fueron iguales para todo el universo de haberes.
Pero, por la suma fija de marzo, en todo el 2020 las jubilaciones tuvieron distintos aumentos. Los haberes mínimos (hoy en 19.035 pesos) subieron 35,3 por ciento, y los máximos (hoy en 128 mil pesos), 24,3 por ciento. Comparado con la inflación, del 36,1 por ciento, todas las jubilaciones perdieron por tercer año consecutivo. De haberse mantenido la fórmula de movilidad, todos los haberes hubieran aumentado 42 por ciento.
Sin embargo, desde que asumió Fernández se otorgaron tres bonos en diciembre, enero y abril, dos de 5000 pesos y uno de 3000, ante la emergencia económica y sanitaria. Por este motivo, tuvieron una diferencia real positiva de 6 puntos, según el informe de la UNGS. Para el cálculo, tomó la jubilación mínima de noviembre 2019, de12.900 pesos, contra los 19 mil de diciembre 2020. En trece meses representa un aumento del 47 por ciento, mientras que la inflación acumulada en el mismo período fue de 39 por ciento.
“En 2020, más de la mitad de los jubilados y pensionados quedaron por encima de la inflación. 8000 pesos en bonos para una jubilación mínima que arrancó en diciembre de 2019 en 14 mil pesos es como un medio aguinaldo, si lo mensualizas, es el 4 por ciento del haber, y dado que con los aumentos por decreto quedaron un punto debajo de la inflación, con los bonos terminaron quedando por encima”, explicó Martínez a este diario.
2021
Los jubilados le ganaron a la inflación durante los gobiernos de Cristina Kirchner en 6 de los 7 años que estuvo vigente la fórmula de movilidad (2009-2015). En la gestión de Mauricio Macri, los adultos mayores perdieron poder adquisitivo en tres de los cuatro años (2016-2019). En 2016 la pérdida fue con la movilidad del kirchnerismo, y en 2018 y 2019, la caída real de los haberes se debió al cambio en la ley de movilidad.
Ande la consulta de por qué durante el macrismo hubo pérdida con ambas fórmulas, Martínez explicó: “Hay que tener en cuenta el contexto global”. Con la fórmula de Cristina Kirchner, los jubilados perdieron en 2014 y 2016, dos años con devaluación y aceleración de la inflación. En 2018 y 2019, la fórmula implicaba que los haberes se ajustarían por inflación. Pero con la inflación más alta de las últimas tres décadas y el rezago en la aplicación, los haberes quedaban atrasados, con una inflación pasada.
“En 2020 era el año para recuperar los puntos perdidos, pero si indexas el principal componente del gasto público, tenes una presión inflacionaria y fiscal importante, por eso el esfuerzo desde los noventa para acá fue desindexar”, explicó Martínez.
Para 2021, Martínez se mostró optimista. “La evolución va a ser acorde a cómo evolucionen las variables que componen la fórmula. Como son salarios y la recaudación que se destina a Anses, lo que se puede esperar es que si los trabajadores y el Estado les va bien, a los jubilados también les va a ir bien”, aseguró. “A partir de junio y septiembre van a ganar porque vas a tener el efecto de la recuperación económica y de los ingresos fiscales”, agregó el economista. La condición de esta nueva fórmula es que el país crezca: “Esa es la condición base para cualquier otra cosa”, concluyó.