En Central vuelve un delantero, como Marco Ruben, y saldrá un defensor, como Cristian Villagra, para el partido del lunes en Buenos Aires ante Temperley. El entrenador Paolo Montero se decidió por un equipo aún más ofensivo y no dudó en explicar los motivos: "Buscamos ser más compactos, prefiero perder arriesgando que esperando atrás al rival. La salida de Villagra es una cuestión táctica, con (José Luis) Fernández en defensa somos más ofensivos". Además ingresarán Paulo Ferrari y Mauricio Martínez. El técnico canaya cree que el rival buscará jugar en mitad de cancha y atacar con los laterales. Y asegura que la situación que se va a plantear "es parecida a cuando jugamos con Sarmiento".
Montero no dudó ayer en reconocer que busca una alienación aún más ofensiva con la vuelta de Ruben al ataque. Porque con el retorno del goleador sale Villagra, Fernández pasa a la defensa y no resigna a ningún volante. "El equipo quiere ser protagonista, aunque hay cosas para mejorar", reconoció el entrenador canaya. Con Ferrari por el lesionado Víctor Salazar y Martínez por el suspendido Damián Musto, el lunes ante el celeste el canaya parará con Rodríguez; Ferrari, Leguizamón, Pinola, Fernández; Carrizo, Martínez, Camacho; Colman; Teo Gutiérrez, Ruben.
"Estamos muy contentos con (Federico) Carrizo, le hizo bien venir. Y Teo (Gutiérrez) es un jugador con mucha personalidad. Si juega así por el problema (la discusión con Marcos Ruben por el penal ante Godoy Cruz), vamos a buscar otro problema", resaltó Montero. Para el técnico auriazul la actuación del volante y el delantero fue decisiva en la victoria ante Atlético Tucumán. Y la verdad es que no se equivoca.
"Temperley busca jugar en mitad de cancha y atacar con los laterales. Ojalá se dé un partido abierto. La situación es parecida a cuando jugamos con Sarmiento", agregó Montero, en referencia a la crítica situación que atraviesa con el promedio el rival del próximo lunes.