Desde Santa Fe

La ministra de Educación Adriana Cantero coincidió ayer que “hay gente que utiliza un tema tan sensible como la vuelta a clases presenciales con una finalidad política”. Evitó involucrar en el reproche a “toda la oposición”, pero quedó claro que es un retruque doble: a Miguel Lifschitz y diputadas socialistas que esta semana -tras reunirse con “padres autoconvocados”- se quejaron por una supuesta falta de “planificación” y “diálogo” en la Casa Gris y al exabrupto de una provocadora del partido de Mauricio Macri, que dijo que si no empezaban las clases “rompemos todo”. “Deberíamos revisar” esos intentos de aprovechamiento político -sugirió- y “en este momento tan complicado que nos toca vivir como humanidad, estar más comprometidos con la cooperación y la colaboración para poder caminar juntos este tiempo tan difícil”.

En una entrevista con Rosario/12, Cantero consideró como un hito histórico la campaña de vacunación contra el covid a más de 85.000 docentes y asistentes escolares de la provincia, ratificó que las tareas comenzarán a “mediados de febrero” y admitió que el 15 de marzo, cuando arranque el ciclo lectivo 2021, su “expectativa" es que "una cantidad considerable de docentes ya estén vacunados. Es nuestro deseo. Vamos a ver cuándo llegan las dosis y cómo se despliega una campaña tan masiva”. “En 2020, planificamos clases presenciales en escuelas sin vacunas” (en 150 de ellas del centro norte) y en 2021, planificamos con la expectativa de que muchos maestros “ya estén vacunados que, por supuesto, es una posibilidad más alentadora”, explicó.

El viernes, Cantero participó en el pleno del Consejo Federal de Educación, junto a sus colegas y el ministro de Educación de la Nación Nicolás Trotta, con una agenda precisa: el regreso progresivo a clases presenciales, la campaña de vacunación a los docentes –prevista en febrero- y la capacitación de los educadores para el año escolar.

La vuelta a clases es el “objetivo a cumplir" en 2021, pero debe realizarse con la “gradualidad” y “flexibilidad” que impone la pandemia, aclaró la ministra. “En Santa Fe, ya tenemos la experiencia en 150 escuelas del centro norte”, donde los chicos trabajaron en “formato bimodal (algunos días en el aula y otros, en su casa), con materiales específicos, distanciamiento social, en pequeños grupos y protocolos”.

Cantero cree que esa “experiencia” en el centro norte, se puede extender en 2021 al resto de la provincia. Pero con una condición: que la vuelta sea a “escuelas protegidas” o “cuidadas”, como las llamó. “Hay una enseñanza y un trabajo” que nos dejó la pandemia. “Por eso somos cautelosos. Nosotros tenemos todo planificado, pero vamos a estar atentos a lo que nos dicen también nuestras autoridades sanitarias” en el Ministerio de Salud. “Porque uno de los aprendizajes vitales de esta época que nos toca atravesar es aprender a cuidarnos y a cuidar. Entonces, los dispositivos tienen que estar enmarcados en esa premisa”, precisó.

"Somos cautelosos. Nosotros tenemos todo planificado, pero vamos a estar atentos a lo que nos dicen también nuestras autoridades sanitarias” 

La campaña de vacunación a los 85.000 docentes y asistentes escolares será entonces una nueva etapa del plan de “escuelas protegidas” o “cuidadas”. El Ministerio de Educación lo definió como programa de “escuelas seguras”, pero a la ministra le gusta más llamarlas “protegidas”.

El plan –dijo Cantero, en otro retruque a Lifschitz y su antecesora Claudia Balagué por la supuesta falta de “planificación” y "diálogo"- comenzó en 2020 para garantizar a las escuelas “agua segura”, sobre todo a las rurales. La segunda etapa fue monitorear todos los establecimientos “desde el punto de vista sanitario, tanques de agua, ventilaciones, ingresos” y garantizar “arreglos y reparaciones”. La tercera etapa asignó más recursos: un subsidio de 70.000 pesos a cada escuela (“todas, desde las más chicas a las más grandes”, dijo la ministra) para instalar los lavamanos y otro para comprar termómetros infrarrojos y demás insumos de protocolo sanitario. La cuarta etapa se completó con el Ministerio de Salud para verificar que todos los niños, niñas y adolescentes tengan el carné de vacunación completo. "Una acción que los resguarda de mayores riesgos, que  las enfermedades estacionales se puedan cruzar con el coronavirus. Tener los carnés de vacunación completos de todos los chicos es otro indicador de escuelas protegidas”, sintetizó.

La quinta etapa será entonces la campaña de vacunación a docentes. “La expectativa que tenemos es comenzar a mediados de febrero”, apenas lleguen las dosis de la Sputnik V a Santa Fe. “No tenemos una fecha exacta”, señaló Cantero. “Lo que sí estamos haciendo con anticipación suficiente es la planificación, los centros de vacunación que se necesitan, dónde estarán localizados y un mapeo con la población escolar que abarcará cada uno de ellos. Hablamos de más de 85.000 docentes y asistentes escolares. Queremos tener asegurada toda esa planificación para que ni bien lleguen a la provincia esas dosis, comencemos esa campaña masiva, que demandará su tiempo”.

-¿Ya saben cuántos centros de vacunación habrá en las escuelas?

-Todavía no tenemos el número preciso. Trabajamos con el Ministerio de Salud en el formato, la cantidad de docentes que hay en cada localidad y dónde deberán desplazarse hasta los vacunatorios. En los próximos días vamos a tener ese dato y lo informaremos. Pero ya hay un trabajo intenso entre los dos ministerios –contestó la ministra. “La vacunación necesita una logística compleja, una cadena de frío y un traslado. En 2020, planificamos clases presenciales en escuelas sin vacunas, y en 2021 planificamos con la posibilidad de que docentes y asistentes escolares estén vacunados, que es una posibilidad más alentadora”.

-El 15 de marzo arranca el ciclo lectivo. ¿Qué expectativas tiene?

-Que para esa época ya tengamos una cantidad considerable de docentes vacunados. Es nuestro deseo. Vamos a ver cuándo llegan las dosis y cómo se despliega una campaña tan masiva. Nuestra línea es: mucha planificación en todos los aspectos. El 15 de marzo vamos a comenzar en ‘escuelas protegidas’. Y le agregaremos la dimensión afectiva. Hay que ver cómo vuelven los chicos y los docentes. Las huellas que el año 2020 de aislamiento y distanciamiento dejó a nivel subjetivo, sobre todo en los niños y adolescentes, que tienen menos recursos simbólicos para explicarse este cambio tan significativo en la vida cotidiana que todos sufrimos.

-Se escuchan muchas críticas por la vuelta a las aulas. ¿La oposición está haciendo política con las clases? –preguntó Rosario/12

-Sí, yo creo que sí. No podemos decir la oposición como si todo el mundo estuviera involucrado. Pero sí creo que hay gente que utiliza un tema tan sensible para la población, sobre todo para nuestros chicos y adolescentes, con una finalidad política, que tal vez deberíamos revisar. Porque deberíamos estar en un momento tan complicado que nos toca vivir como humanidad más comprometidos con la cooperación y con la colaboración para poder caminar juntos este tiempo difícil –concluyó Cantero.